El Gerente municipal de la ciudad de Puebla, Adán Domínguez, sostuvo que las calles del Centro Histórico no son de los ambulantes y que, por lo tanto, no hay nada qué negociar.
En entrevista, el funcionario comentó que los informales no se pueden adueñar de las avenidas.
Manifestó que, así como ellos piden su derecho a trabajar, los ciudadanos y comerciantes establecidos deben tener la garantía de poder estar en su empleo, además de que pagan sus impuestos.
Agregó que los peatones tienen el derecho de caminar de manera segura; de igual forma, los usuarios del transporte público, de circular de manera adecuada.
“Vamos a seguir cuidando, ordenando, mejorando, nuestro centro histórico, que es patrimonial, no hay nada que negociar con estos grupos”, señaló.
Calificó como un intento de desestabilización, las acciones emprendidas por el comercio informal.
Agradeció el apoyo al gobernador Miguel Barbosa Huerta y de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, por la coordinación y el trabajo conjunto.
“Seguiremos haciendo este tipo de operativos conforme a la ley”, indicó.
Domínguez Sánchez argumentó que la mayoría de la población está a favor de tener un centro ordenado y eso es lo que se está haciendo.
Advirtió que será confiscada la mercancía de quien intente vender en las calles de la ciudad.
Ayer, 7 de julio, con el uso de la fuerza pública, el Ayuntamiento de Puebla retiró a lo ambulantes que habían regresado a las calles del Centro Histórico de Puebla.
Lo anterior provocó, por unas horas, mucha tensión entre los visitantes y comerciantes establecidos y algunos determinaron cerrar sus negocios.
Al respecto, el gobernador Miguel Barbosa Huerta indicó que el gobierno municipal de Puebla debe ser firme y mantener el diálogo con los ambulantes para darles alternativas sobre en qué lugares pueden vender.
Indicó que la policía estatal seguirá apoyando al Ayuntamiento para tener libres las calles del Centro Histórico, pero sin reprimir.
