El cadáver de un bebé fue hallado con cicatrices de una presunta intervención médica dentro de un bote de basura del Centro de Reinserción Social (Cereso) de San Miguel, en la capital de Puebla.
De acuerdo con las investigaciones que fueron reveladas hasta el jueves 13 de enero de 2022, el personal custodio vigilaba el pasado lunes 10 de enero los pasillos.
En su recorrido, un interno que estaba recolectando PET le dijo que dentro de un bote de basura había un bebé sin vida.
Los guardias le dieron aviso a los peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE), quienes indicaron que tenía tres meses de nacido.
Las autoridades ministeriales también señalaron que tenía cicatrices de una supuesta intervención quirúrgica.
Tras realizar las diligencias, llevaron al anfiteatro el cuerpo del bebé, de quien hasta el jueves 13 de enero desconocen quién y cómo lo abandonó en el bote de basura.
Los rumores sobre este hecho habían circulado como trascendidos, sin confirmación oficial. No obstante, hasta ahora, no ha habido más detalles por parte de las autoridades.
