La inflación en el país tocó su punto más alto en 22 años para la primera quincena de 2023, con una tasa anual de 7.94 por ciento, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

En la primera mitad de enero de este año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor aumentó 0.46 por ciento respecto a la quincena anterior, la tasa mayor al 0.39 por ciento observada en la primera quincena de 2022.

El periodo de referencia mostró un efecto estacional adverso debido al aumento al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que impacta a las gasolinas y algunos alimentos procesados como las bebidas azucaradas, bebidas alcohólicas y cigarrillos; así como a los ajustes habituales de principios de año en bienes y servicios.

La inflación es un fenómeno económico en el cual los precios de los bienes y servicios aumentan constantemente en un período de tiempo determinado.

Se mide generalmente mediante el índice de precios al consumidor, que es una medida estadística que refleja el cambio promedio en los precios de un conjunto de bienes y servicios consumidos por las familias.

La inflación tiene efectos negativos en una economía pues, por un lado, reduce el poder adquisitivo de los ciudadanos, ya que cuando los precios suben, el mismo dinero compra menos bienes y servicios, y por otro lado, puede generar incertidumbre económica, ya que las personas y las empresas pueden tener dificultades para planificar y tomar decisiones debido a las fluctuaciones en los precios.

Hay varias causas de la inflación, como el aumento de los costos de producción, el aumento de la demanda, la impresión de dinero en exceso, entre otros.

Los bancos centrales y los gobiernos utilizan diferentes herramientas para controlar la inflación, como la política monetaria y fiscal, con el objetivo de mantener los precios estables y el crecimiento económico.

El incremento general de precios en la primera mitad de enero se ubicó por arriba del consenso de los analistas de 7.86 por ciento a tasa anual, pero dentro del rango de entre un mínimo de 7.60 por ciento y un máximo de 8.08 por ciento estimado por las 32 instituciones financieras consultadas por CitiBanamex, de la cuales sólo una acertó con su pronóstico.

El índice de precios subyacente, que incluye los bienes y servicios cuyos precios son menos volátiles, observó un crecimiento de 0.44 por ciento a tasa quincenal y anual 8.45 por ciento, la tasa más alta desde la segunda quincena de octubre del año pasado. A su interior, los precios de las mercancías incrementaron 11.02 por ciento a tasa anual y los de servicios, 5.47 por ciento.

En el mismo periodo, el índice de precios no subyacente subió 0.51 por ciento quincenal y 6.44 por ciento a tasa anual. Dentro del índice, a tasa quincenal, los precios de los productos agropecuarios crecieron 9.99 por ciento a tasa anual y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno crecieron 3.59 por ciento.

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