Pobladores y turistas que llegan al  Centro Histórico de Puebla pueden adquirir desde un helado o un café hasta muebles, refacciones y más, dijo José Juan Ayala Vázquez, presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico de Puebla A.C.

“Tenemos todo para ser un gran centro comercial, porque hay 10 mil 125 comercios legalmente establecidos de todos los giros y hay algunas zonas definidas como la de jugueteros en la 16 Poniente, la zona de papelerías en la 8 Poniente, de ropa sobre la 5 de Mayo, la calle de los dulces en la 6 Oriente”, dijo en entrevista con El Universal Puebla.

Añadió que el Centro Histórico de Puebla también es el más extenso de América Latina y es catalogado como Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Sin embargo, reconoció que el primer cuadro de la ciudad se está convirtiendo en un centro comercial que expulsa a sus invitados, por lo que los comerciantes pugnan por recuperar a su clientela.

El primer problema, dijo, es que la ciudad no tiene un transporte público digno ni de calidad, un tema que le corresponde al gobierno del estado.

A ello se suma la mala movilidad que hay en la ciudad, a lo que el Ayuntamiento de Puebla trata de darle solución con la implementación de los parquímetros.

“Lamentablemente al no tomar en cuenta a los empresarios, se siguen haciendo adecuaciones que solo dan solución a la captación de ingresos por medio de las multas, pero no por la renta de espacios públicos”, citó.

Antes de la pandemia los clientes acudían al Centro Histórico a comprar de 9:00 a 21:00 horas, pero a raíz de la contingencia, el comercio modificó su horario de compra-venta y ahora es de 11:00 a 19:00 horas.

Añadió que si los clientes llegan muy temprano no tienen dónde pagar el estacionamiento y si llegan muy tarde no encuentran dónde estacionarse.

Destacó que en el norte del Centro Histórico hay un desorden porque las motos ocupan los lugares de los autos, los autos de las ciclovías y los ambulantes, las banquetas.

Reconoció que la presente administración municipal está haciendo su tarea y citó como ejemplo que les ayudó mucho que se limpiara las calles de la presencia de vendedores ambulantes, pues con ello se le dio buena imagen a los habitantes y el turismo.

El alumbrado festivo también fue buena idea para que la gente se animara a acudir al corazón de la ciudad, comentó.

José Juan Ayala añadió que en las mesas de diálogo con la autoridad piden que los comerciantes informales tengan espacios para vender, pero fuera del primer cuadro de la ciudad.

También han pedido que haya una comunicación constante con la autoridad y que antes de poner en marcha alguna acción pública, los comerciantes sean tomados en cuenta.

“Querétaro ha dado muestra de cómo puede funcionar un programa de parquímetros, mientras que Colombia es un referente en materia de movilidad, pero la autoridad nos ha quedado mal y no nos ha tomado en cuenta”, mencionó no sin antes seguir invitando a la gente para que siga acudiendo al Centro Histórico.

Google News

TEMAS RELACIONADOS