Cada fin de semana, familias, amigos o parejas visitan el OVNI de Metepec, en el Pueblo Mágico de Atlixco, para tomarse la foto, pero ahora se encuentran con una sorpresa: tres marcianos.
A través de redes sociales se han difundido imágenes de tres personas que, con máscara extraterrestre, conviven, posan y bailan con los visitantes.
El “marciano mayor” es Rogelio Jiménez, quien en entrevista con El Universal Puebla, relató cómo surgió esta iniciativa que es del agrado de quienes llegan al denominado Punto Marconi.
Cabe señalar que en este punto permanece fijo un tanque elevado de agua que después de cumplir con su vida útil en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), fue donado al municipio de Atlixco para colocarlo como si se tratara de un objeto volador no identificado (OVNI).
El objetivo de este artefacto es mantener viva la idea de los avistamientos de objetos luminosos que tuvieron su auge en los años 90 y que, a decir de los habitantes, en ese entonces era común verlos volar a baja altura en esta zona.
El marciano mayor narró que a consecuencia de la pandemia por Covid-19 no tenía trabajo en su natal Metepec y un día decidió subir a Punto Marconi, donde conoció a los señores que se dedican a vender papalotes.
Estando ahí y viendo que los visitantes llegaban y comentaban que estaban agobiados por la pandemia, decidió darles un poco de alegría y se puso una máscara de OVNI con ojos grandes, rostro triangular y gris.
Conforme más gente llegaba, los comentarios que recibía eran positivos, entonces se animó a bailar con los paseantes, hacerlos reír, dar mensajes de aliento y hasta posar para la foto a cambio de 10 pesos.
“Mi idea principal es beneficiar a los niños, que no estuvieran acongojados por la pandemia o por los problemas que la enfermedad generaba y más que nada era para alegrar a sus corazones. Pensé: no tengo trabajo, entonces voy a ayudar a la gente para que se les olviden los problemas”, explicó.
A esta iniciativa se sumó otro hombre que tampoco tenía trabajo y que vive con discapacidad, así como una niña de 11 años de edad, hija de su compadre, quien causó curiosidad entre los visitantes.
Los marcianos de Metepec solo acuden los sábados y domingos, de 12:00 a 18:00 horas, tiempo en el que bailan, hacen bromas a los visitantes, cuentan chistes y se toman la fotografía “para que se lleven un pequeño recuerdito de Metepec”.
Entre semana, dijo el hombre de 41 años de edad, se dedica a trabajar en una taquería de Metepec, actividad que alterna con su oficio de albañil, entre otras actividades.
“Los comentarios que recibimos es de gracias, de qué bueno que les alegran la visita y muchos también nos preguntan por qué hay ahí un platillo, quién lo hizo y cómo llego ahí”, dijo tras abundar que también tuvo que informarse para no dar datos erróneos a los visitantes.
Rogelio Jiménez reconoció que a través de las redes sociales han comenzado a hacerse famosos los marcianos de Metepec, tanto que recientemente el grupo musical Radmon 21, de esta localidad, les pidió grabar un video musical con ellos.
“Mi esposa me dice que ya me inmortalicé con la idea de los marcianos de Metepec y está mi familia muy contenta. A mi me da mucho gusto poder llevarle alegría a las personas y que sepan que todas las adversidades tienen solución, que no hay que estar tristes”, compartió.
La popularidad de estos personajes los ha motivado a emprender otro proyecto, para lo cual están gestionando los permisos correspondientes con la autoridad municipal, pues la idea es instalar una tirolesa en el mismo lugar.
Punto Marconi se ubica en la cima de un cerro entre Metepec y San Baltazar Atlimeyaya, a unos 40 minutos de la ciudad de Puebla.
