Estado

​33% de jóvenes abandona la escuela para irse a trabajar

Estudio revela que a mayor preparación, se consiguen empleos mejor pagados y puestos de mayor jerarquía

Foto: Agencia Es Imagen para El Universal Puebla
01/05/2022 |09:52Angeles Bretón |
Angeles Bretón
RedactorVer perfil

En México, el 33 por ciento de la población en edad de estudiar una carrera decide no hacerlo y comienza a trabajar sin estudios superiores en un mercado laboral, que cada día es más exigente y complicado.

Así lo revelo el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) en su reporte “Los jóvenes sin preparación son más vulnerables en el mercado laboral”, en el que destaca que siete de cada 10 jóvenes de 15 a 24 años trabajan en la informalidad.

Subraya que al emplearse en la informalidad los trabajadores no tienen acceso a seguridad social y al cumplimiento de sus derechos laborales, lo que implica una situación laboral incierta y vulnerable.

En el estudio se señala que en 2019, 1.4 millones de jóvenes se graduaron de bachillerato, cifra 1.6 veces mayor que hace una década, y se notó que dos de cada tres iniciaron una licenciatura o una carrera técnica.

Los jóvenes con bachillerato y licenciatura ganan 14 por ciento más en comparación con los jóvenes que solo cuentan con estudios de secundaria.

“Esto se debe a que la educación, en especial estudiar una carrera, es una de las mejores formas para desarrollar habilidades y capacidades que permiten alcanzar empleos mejor pagados, con seguridad social y prestaciones, y mayores expectativas de crecimiento en el futuro”, se señala en el estudio.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 5 mil 695 pesos es el ingreso promedio mensual de la población entre 15 y 24 años de edad que se encuentra ocupada.

Si cuenta con estudios de nivel primaria, el ingreso mensual promedio es de 5 mil 153 pesos; en caso de estudios de nivel secundaria, el ingreso promedio es de 5 mil 420 pesos.

Para el trabajador, en ese mismo rango de edad, con nivel preparatoria, el ingreso mensual es de 5 mil 610 pesos en promedio, pero para los trabajadores con nivel de estudio profesional, la mensualidad es de 6 mil 676 pesos.

Otro dato revelador es que aunque cada vez hay más jóvenes con estudios de educación media superior y superior, las condiciones laborales a las que se enfrentan las personas en este rango de edad implican menor certeza e ingresos debido a los siguientes factores:

-Altas tasas de informalidad

El 68 por ciento de los jóvenes de 15 a 24 años está en informalidad, de esta cifra el 64 por ciento cuenta con preparatoria, y sólo 55 por ciento con carrera profesional tiene empleo informal.

-Bajos ingresos. Durante el cuarto trimestre del 2021, los jóvenes reportaron ingresos promedio por 5 mil 695 pesos. Los que consiguieron un empleo formal ganaron 7 mil 321 pesos mensuales, y los que se emplearon en la informalidad recibieron 4 mil 847 pesos mensuales.

-Mayor dificultad para encontrar empleo.

La proporción de personas de 15 a 24 años que buscan activamente un empleo y no lo encuentran es dos veces mayor que la que presenta el grupo de 25 a 44 años, y tres veces mayor que la del grupo de 45 a 64 años.

-Incluso cuando tienen trabajo, suele ser insuficiente. Tres de cada 10 jóvenes de 15 a 24 años disponibles para trabajar, no trabajaron, trabajaron poco o estuvieron desmotivados para buscar empleo.

También se agrega que durante la pandemia, los trabajadores más jóvenes y la población con un empleo informal fueron de los más afectados.

Sin embargo, al cuarto trimestre de 2021, solo aquellos trabajadores con estudios de preparatoria y universidad lograron recuperarse, e incluso superar el nivel de empleo observado antes de la pandemia.

Ante este panorama, el IMCO propone:

-Continuar con estudios de educación media superior y superior, lo que implica campañas de información y programas flexibles de educación para que los estudiantes continúen su preparación.

-Aprovechar ComparaCarreras.org, una herramienta pública con datos sobre los costos y beneficios de diferentes carreras, para tomar una decisión más informada sobre qué estudiar.

-Impulsar un mayor vínculo entre el sector privado y el académico.

-Fomentar la vinculación entre futuros profesionistas jóvenes y empresas, por ejemplo, a través de programas de prácticas profesionales.