A una semana de la aparición del socavón, la incertidumbre impera en la población de Santa María Zacatepec, en el municipio de Juan C. Bonilla, y el temor de perder sus cosechas crece entre los campesinos.

Así lo manifestó un grupo de productores del campo, quienes esta mañana acudieron a la zona del hundimiento para reunirse con personal de Protección Civil y pedir les autoricen continuar con sus labores agrícolas.

Ante el crecimiento del diámetro de la oquedad, y el inminente colapso de la única vivienda ahí asentada, autoridades de los diferentes niveles de gobierno han ampliado el cerco de seguridad para evitar que la gente se pongan en riesgo.

Dicha delimitación ha abarcado campos de diferentes cultivos como maíz, frijol y alfalfa, entre otros, de tal manera que los campesinos no han podido ingresar a sus tierras.

“Yo lo único que quiero es que me dejen cortar un poco de alfalfa, con eso podría salvar la cosecha y recuperar un poco de lo que ya invertí en mis tierras”, expresó el campesino Miguel Torres Lozano.

En la reunión, los productores también demandaron a las autoridades e investigadores que realizan los estudios de suelo en el sitio, que delimiten el área de trabajo para que los campesinos conozcan quiénes sí pueden seguir trabajando y quiénes no.

Para los que no puedan regresar a sus labores, piden que el gobierno les apoye con recursos económicos, pues es el único ingreso que tienen para el sostenimiento de sus familias.

Pascual Aguas dijo que sus cultivos de maíz y frijol están a unos 400 metros de distancia del socavón y desde que lo vio creyó que no le iba afectar, “pero cada vez se hace más grande el hoyo y me da miedo que sí llegue hasta mi campo”, dijo.

Más adelante, comentó, existen varios cultivos de verduras como cebollas, nopales y hortalizas, porque en esa área de cerca de 40 hectáreas hubo quienes decidieron probar con otro tipo de cultivos.

“Santa María Zacatepec se conforma por cuatro barrios y hace muchos años hubo ejidatarios que vendieron, ahora son terrenos particulares y hay lotes desde 16 metros hasta 400 metros, pero todos vivimos del campo de temporal y por eso queremos una respuesta”, insistió.

En tanto, personal de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) continúa monitoreando el hundimiento y confirmó la ampliación del perímetro de seguridad, así como la extracción de muestras de agua y la colocación de electrodos para sondeo a 50 metros.

Aunado a estas acciones, el Centro Nacional de Prevención de Desastres Naturales (Cenapred) ha determinado que es altamente posible que el origen del socavón se encuentre asociado a la presencia de flujos de agua subterránea.

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