Mediante la tienda de raya digital llamada Plataforma Inteligente de Impacto Social que creó Alejandro Martínez Araiza, secretario general del Sindicato Nacional Alimenticio y de Comercio (), obtiene poco más de 51 millones de pesos al año, denunciaron trabajadores disidentes de esa agrupación.

Explicaron que bajo el slogan: “Tu cuota vale por 30”, Martínez Araiza ofrece a los trabajadores del SNAC para que paguen, adicional a su cuota sindical, un promedio de 252 pesos al mes a cambio de cupones de almacenes comerciales, descuentos, asistencia médica y funeraria, además de financiamientos.

Indicaron que estos servicios no son gestionados directamente por el sindicato, sino a través de terceros, empresas que son usadas por factureras como Beneficios 360, Karam, Integralis y Consultoría de Negocios Estratégicos SC. El costo real de dichos servicios es menor a los 100 pesos por persona.

En otras palabras, Martínez Araiza cobra a los trabajadores por “beneficios” que podrían conseguir por sí mismos a un costo mucho menor. Y lo vende como un gran logro. En realidad, está intermediando con servicios empaquetados y cobrando sobreprecio, destacaron los trabajadores disidentes.

En el SNAC están afiliados 17 mil obreros de los sectores alimenticio y del comercio en todo el país, incluido el Estado de Puebla, desde luego.

Aún más, Martínez Araiza promociona como un gran beneficio que se les otorguen préstamos a los trabajadores para ser liquidados en 6 o 12 pagos semanales con 160% de interés anualizado, lo que es una práctica de usura.

“Las preguntas que se hacen los trabajadores y las que se deberían estar haciendo la Secretaría del Trabajo y la Unidad de Inteligencia Financiera son: ¿En qué bolsillo termina ese dinero, las cuotas sindicales y el patrimonio del SNAC? ¿Cuánto reciben los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional del sindicato a cambio de su silencio?”, puntualizaron.


Recordaron que, en el Porfiriato, las tiendas de raya vendían a precios elevados productos básicos a campesinos y obreros e incluso ofrecían créditos que se convertían en deudas impagables para los trabajadores.

Martínez Araiza pregona un “sindicalismo moderno”, pero en realidad continúa las malas prácticas del pasado y disfraza con tecnología y supuestos beneficios lo que a todas luces es un engaño para los trabajadores, expusieron.

Uno de los elementos más injustos en la tienda de raya a la que somete Martínez Araiza a los 17 mil agremiados del SNAC, es el referente a los descuentos por gastos funerarios, debido a que los trabajadores dejan de obtener ese beneficio cuando alguno de sus familiares y fallece e inmediatamente esa “prestación” se cancela para el mismo obrero que hace su aportación mensual.

Lee más:

Google News

TEMAS RELACIONADOS

[Publicidad]