El bloqueo carretero que mantienen campesinos y productores sobre la autopista Puebla-Veracruz, a la altura de Palmarito Tochapan, provocó un altercado entre María Guadalupe Martínez Gerardo, presidenta municipal de Quecholac, su padre Antonio Valente Martínez Fuentes -conocido como El Toñín, presunto líder huachicolero- y Samuel Aguilar Pala, secretario de Gobernación estatal (Segob).
La tarde del martes 2 de diciembre, a través de sus redes sociales, “El Toñín”, reclamó porque el secretario de Gobernación llamó por teléfono a su hija -la presidenta municipal de Quecholac- para pedirle que atendiera la protesta que los campesinos mantienen sobre la carretera de cuota.
En un video de 16 minutos, en el que se puede observar su enfado, dijo que él estaba pasando por un mal momento, pues vio que su hija estaba preocupada por las palabras que le dijo el titular de Segob en el estado.
“La tristeza, el coraje y la impotencia como papá de Lupita, de verdad que es algo muy desgarrador que no se lo deseo a nadie, porque a los presuntos políticos se les pone, se les da el voto de confianza y no es para que sometan a nadie”, mencionó y se dijo muy indignado y que está en contra de la violencia de género que, acusó, cometió el Secretario de Gobernación.
Al darle el uso de la palabra a su hija, la presidenta municipal de Quecholac narró cómo fue la llamada por teléfono con el secretario de Gobernación, Samuel Aguilar Pala, el martes 2 de diciembre.
La mujer de 23 años de edad, en su relato dijo que el funcionario estatal le pidió que resolviera el tema de la manifestación de los campesinos que mantienen bloqueado los dos carriles de la autopista, a la altura de Palmarito Tochapan, junta auxiliar de Quecholac.
En la narración, la presidenta municipal Guadalupe Martínez mencionó que el titular de Segob no le dio la oportunidad de exponer sus razones, que ella no podía hacer nada al respecto y que no era competente para ello.
La alcaldesa dijo que lo que más “la sacó de control” fue escuchar que el secretario de Gobernación dijo: “Además yo sé que tu papá está involucrado”.
Guadalupe Martínez, con voz quebrada y a punto del llanto, dijo que en ese momento se sintió intimidada y hasta amenazada, por lo que su preocupación fue detectada por su padre a quien le tuvo que platicar lo ocurrido por temor a que le fueran a fabricar delitos “como lo hicieron en el pasado”.
Por ese motivo, El Toñín compartió el video en las redes sociales para informar a los habitantes de Quecholac lo ocurrido, al tiempo de responsabilizar al secretario de Gobernación del estado de Puebla por lo que le llegue a pasar a su hija.
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Antonio Martínez sostuvo que sí invitó a los campesinos a que no se manifestaran de manera violenta, pero también los entiende porque “cuando le quiten al agricultor las ganas de trabajar el campo, no habrá qué comer, qué producir. De mi parte no van a ser bloqueos, pero sí convocaría a dejar de producir comida”.
Tras darse a conocer el video en el que el padre de la presidenta municipal de Quecholac la defiende y llama “cabrón” al secretario de Gobernación estatal, esta dependencia fijó su postura, pero también cuestionó quién es la persona que gobierna en ese municipio ubicado en la zona llamada Triángulo Rojo.
A través de un comunicado, apuntó que la Segob mantiene una comunicación y relación respetuosa con los gobiernos de los 217 municipios que conforman el estado.
En el escrito se menciona que en el caso de Quecholac, hoy por la mañana se presentó una manifestación en la que se cerraron ambos carriles al tránsito en la autopista Puebla-Orizaba, a la altura del km 190, en la junta auxiliar de Palmarito Tochapan.
“Se le solicitó información a la presidenta municipal, María Guadalupe Martínez Gerardo, para conocer el motivo e inquietudes de sus pobladores, pues nuestra labor es la gobernabilidad y estabilidad social, desconozco si los destinos de Quecholac los lleva otra persona ajena a la autoridad municipal”, se lee en el comunicado.
La dependencia estatal no abundó en detalles, solo reiteró que su compromiso es trabajar de la mano con todas las autoridades de los ayuntamientos en el estado, sin distingo partidista; y que el trato hacia todos los alcaldes y alcaldesas, incluido Quecholac, es de respeto y diálogo.
“Desmentimos rotundamente algún tipo de amenaza. Reiteramos el apoyo, solidaridad y respeto a los pobladores de este municipio y sus autoridades, a quienes les ofrecemos diálogo permanente para solucionar cualquier demanda y abonar a la paz social”, concluyó el comunicado.
Lo cierto es que al cierre de esta nota los campesinos inconformes mantienen bloqueada la carreta de cuota, en ambos sentidos, lo que ha provocado largas filas y la inconformidad de los automovilistas y transportistas de carga, pues suman ya 16 horas de protesta contra la reforma a la Ley General de Aguas.