El Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (Conave) emitió un aviso y recomendaciones respecto a los casos de rabia humana que se han registrado en algunos estados del país.
El aviso es para todas las unidades médicas de primer, segundo y tercer nivel de atención, Unidades de Vigilancia Epidemiológica Hospitalaria (UVEH), y miembros de la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública (Rnlsp)
Precisan que la rabia humana se divide en urbana, la cual es transmitida por perros y gatos, y la selvática, transmitida por murciélagos, coyotes, zorros, zorrillos, mapaches y otros mamíferos.
Se señala que los animales de interés económico como vacas, cabras, ovinos, cerdos, caballos, entre otros, son susceptibles a la rabia y pueden transmitirla por contacto con el ser humano.
Respecto al periodo de incubación, la mayoría de los casos es de uno a tres meses, aunque se han documentado periodos mayores de un año.
El primer síntoma comúnmente reportado es dolor neuropático en el sitio de inoculación. La enfermedad puede manifestarse en forma furiosa o paralítica.
La fase neurológica cursa con lapsos de lucidez y delirio, respiración rápida, parálisis de nervios craneales, músculo cardiaco y músculos respiratorios.
Cuando el virus alcanza el sistema nervioso central es irreversible, causando la muerte dentro de los siete a 10 días posteriores a la presentación del primer síntoma.
En esta fase la enfermedad evoluciona en horas, manifestándose hiperactividad, desorientación, delirio, alucinaciones, convulsiones y rigidez de nuca, que progresan hasta la parálisis irregular de los músculos respiratorios, lo que conduce al estado de coma que puede durar horas o días y posteriormente a la muerte.
Lo anterior, luego de que durante diciembre de 2022 se registró al Sistema Especial de Vigilancia Epidemiológica de Rabia Humana un caso confirmado de rabia humana transmitida por fauna urbana en Nayarit, derivado de la agresión a una persona por un gato sin antecedente de vacunación.
En cuanto a rabia humana transmitida por fauna selvática, en abril de 2022 se registró un caso confirmado transmitido por murciélago en Jalisco.
Adicionalmente, en diciembre, en el estado de Oaxaca se notificaron dos casos confirmados (uno por laboratorio y otro por asociación epidemiológica) y un probable, seguido de la notificación de tres casos sospechosos más en el mes de enero de 2023, todos ellos por agresión por murciélago.
En enero de 2023 se confirmó la presencia del virus rábico en un canino en el estado de Sonora, cuya caracterización antigénica identificada es la variante V.7 asociada al zorro gris.
Actualmente, se está dando seguimiento a nueve personas que tuvieron contacto de riesgo con el canino.
En México, todo caso sospechoso, probable y confirmado de rabia humana debe ser registrado en los establecimientos para atención médica y notificarlo de forma inmediata al Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave).
Las recomendaciones para la población son:
- Evitar tener contacto con animales selváticos.
- Acudir a vacunar contra la rabia a los animales de compañía, perros y gatos, a partir del mes de edad, con refuerzo a los 3 meses y posteriormente de manera anual, así como conservar el registro de vacunación.
- Mantener el control y vigilancia sobre las mascotas para evitar que tengan contacto con animales de fauna selvática potencialmente transmisores de rabia.
- Lavarse las heridas por mordeduras o rasguños por colmillos, en seguida de una agresión por cualquier animal potencialmente transmisor de rabia, con agua y jabón o solución antiséptica y acudir inmediatamente a la unidad de salud más cercana, comentando el incidente de agresión.
- Evitar realizar actividades de control de poblaciones de mamíferos, ya que se ha comprobado que la eliminación de murciélagos, zorrillos, zorros no es buena medida de control.