Si consideras que eres una persona dedicada y responsable en el trabajo, checa los siguientes síntomas, porque podrías estar cayendo en una adicción y convertirte en un "trabajólico".
De acuerdo con la página de la Secretaría de Salud del estado, la adicción al trabajo es la necesidad incontrolable de trabajar sin descanso.
La dependencia señaló que los adictos al trabajo asumen cada vez más tareas y valoran el trabajo por encima de todos, más que sus relaciones personales y familiares.
En una infografía clasificó los siguientes síntomas: llevarse trabajo a casa cuando no es necesario, no saber desconectarse de la oficina y sentimiento de culpa cuando deja tareas sin terminar al final de su jornada laboral.
Para un trabajólico, lo profesional siempre está por encima de la vida personal, tiene dificultad para hablar de temas fuera de lo estrictamente laboral y se distancia de familia y amigos.
El adicto al trabajo siempre se queda en la oficina, y tiene la necesidad de ser admirado por los demás, sobre todo por los jefes, señaló.
La Secretaría de Salud estatal también enlistó una serie de consejos para prevenir la adicción, como establecer un programa de actividades fuera del ambiente laboral, reduciendo el tiempo de trabajo.
Sugirió que como persona hay que conocerse más y analizar su propia trayectoria, saber priorizar tareas, distinguir lo urgente de lo importante, aprender a delegar y a decir que no, aprender técnicas de relajación y respiración.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció esta adición como un trastorno mental en la última versión de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE), y se prevé que esta nueva clasificación entre en vigor el 1 de enero de 2022.
La nueva clasificación del exceso de trabajo la describe como "un agotamiento físico y mental debido al estrés crónico asociado con el trabajo y el desempleo".
