En la casa 18 de la colonia Rincón Arboledas, Ana Michaelle Cruz Contreras, crea puntada tras puntada unos ositos memoriales, figuras de tela elaboradas con las prendas que pertenecieron a personas que ya fallecieron, para que sus familias vivan su duelo y conserven para siempre un recuerdo vivo.
Sobre la mesa del pequeño taller que instaló en su casa, la fundadora de la marca Hecho con Amor recibió a El Universal Puebla.
Aclaró que no hace juguetes sino una artesanía para colocar en un lugar especial para cada familia.
“El objetivo es preservar los recuerdos que se tienen. Por ejemplo, yo ya no tengo a mi mamá, pero quiero tener algo que le perteneció, como una blusa que me gustaba que usara un 10 de mayo. Entonces me traen la prenda y la transformo en un osito memorial”, explicó.
También hace recuerdos con ropa de bebé, como mamelucos y ropones, para recordar el nacimiento; uniformes para recordar las graduaciones, prendas especiales para el novio o la novia, o el uso de telas nuevas para fechas especiales como un 10 de mayo.
Entre sus clientes están aquellos que recientemente perdieron a un familiar a causa del Covid-19 o personas que conservan ropa de sus padres que fallecieron hace muchos años, pero que anhelan tener un osito memorial para heredar a hijos y nietos.

Antes de la pandemia elaboraba 10 ositos memoriales por semana, pero conforme se incrementaron los picos de contagios y los decesos por Coronavirus, llegó a calendarizar entregas de 60 piezas por semana.
“Desafortunadamente estas pérdidas nos han dejado un vacío muy grande y creo que esto ayuda mucho. Varias clientas me han dicho que van al psicólogo o al tanatólogo y les están dando el consejo que tengan su osito memorial, porque eso les ayuda a cerrar ciclos y poder superar de la mejor manera la pérdida de un ser querido”, comentó.
Pañuelos, camisas, suéteres, chamarras, batas de trabajo, uniformes escolares o militares, jersey del Puebla de La Franja o telas nuevas, son parte de las transformaciones que ha hecho Ana Michaelle, junto con sus tres empleados.
Ante la pandemia, y como medida de protección para su taller y sus clientes, no acepta prendas desgastadas, que no estén lavadas ni sanitizadas; a cambio, ella se compromete a transformarlas en osos -que es su especialidad-, o en koalas, dinosaurios, leones, conejos, ratones y gatos.

Alfileres, hilos de colores, agujas, máquinas de coser, una bordadora, tijeras, plantillas, patrones y mucha paciencia hacen la magia para convertir una prenda en una pieza especial, de gran valor sentimental para aquellos que han perdido a un ser querido.
Como el caso de una clienta de Hecho con Amor, que le compartió un video del momento en que una niña de 4 años recibió una conejita que su tía mandó hacer con la camisa de trabajo de su padre y un audio.
“El padre de la niña había muerto tras un accidente automovilístico y la niña lo extrañaba mucho y no dormía, esperando en la noche que su papá llegara de trabajar. Cuando le entregaron la conejita, la niña dice: Es mi papá. Yo vi el video y lloré mucho, pero me dejó mucha satisfacción haber podido ayudar en algo a la niña”, relató.
Hay ositos memoriales de 24, 30 y 45 centímetros; los precios varían dependiendo del tamaño, ya que hay quienes piden desde una pieza hasta 28 piezas para una sola familia; y los Hecho con Amor, para distinguirse de otras marcas, tiene como característica que su nariz es en forma de corazón.
Lucen formales porque cuida cada detalle como botones, listón al cuello, zapatos y el bordado de alguna frase o pensamiento especial sobre el pecho izquierdo de cada pieza, como: “Este amor es infinito, une al cielo con la tierra”.
También pueden incluir una caja de voz, audios o dedicatorias que los clientes entregan para hacer aún más personalizado el osito memorial.
Son tan enternecedores que su lista de clientes crece por recomendaciones “o por la publicidad de boca en boca”. Por ello, ha elaborado piezas que dolientes han regalado a familiares que viven en Israel, Alemania y Estados Unidos, así como en ciudades de Campeche, Cancún, Durango, Mérida, Pachuca, Sonora, Tlaxcala, Toluca y Zacatecas.