Cada vez resulta más común que las personas porten en sus bolsos o en el vehículo una bolsa de mandado extra, para que al momento de hacer la despensa puedan portar todos los artículos que compran.
Ello se debe a que los supermercados y tiendas de autoservicio ya no te otorgan bolsas de plástico como antes, cuando incluso te daban una bolsa para guardar el papel higiénico, una bolsa para los jabones, otra bolsa para las sopas, frijoles y azúcar y una bolsa más para otros productos.
En Puebla, el 12 de julio de 2019, en el Periódico Oficial del Estado de Puebla, se publicó la reforma a la Ley para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos Sólidos Urbanos y de Manejo Especial, con la que quedó prohibida la entrega de bolsas de plástico y popotes en negocios.
A partir de esa fecha, con la reforma aprobada por el Congreso del Estado, los supermercados, tiendas de autoservicio, farmacias, tiendas de conveniencia, mercados, restaurantes y similares, tuvieron 18 meses de plazo para dejar de dar bolsas con la mercancía que vendían.
Se prohibió a los establecimientos el uso y entrega de bolsas de plástico para el traslado de productos o mercancías, pero sí hubo algunas excepciones por higiene, salud, conservación, que necesitan ser empaquetados, siempre y cuando fueran materiales 100 por ciento reciclables.
Una de las razones fue el argumento de que las bolsas estaban hechas de material como politereftalato de etileno, tereftalato de polietileno, polietileno tereftalato o polietilentereftalato (PET por sus siglas en inglés).
Dicho material es un tipo de plástico muy utilizado en el sector de la alimentación, por lo que era necesario para la lucha contra la contaminación y el calentamiento global; además, tardan más de 500 años en degradarse.
Por parte del Ayuntamiento de Puebla, con la entrada en vigor de esta reforma, se fijaron sanciones para quienes no cumplan con la medida, multas que van de 15 a 500 Unidades de Medida y Actualización (UMA), que equivalen a mil 556.1 pesos hasta 51 mil 870 pesos, toda vez que el valor de la UMA es de 103.74 pesos para el 2023.
Durante los primeros meses fue notorio cómo en los mercados municipales los comerciantes pesaban los jitomates, calabazas, cebollas y chiles y los vaciaban a las bolsas de mandado de los clientes, pues ya no daban las bolsas de plástico.
En tanto, en los supermercados se vendieron bolsas de red en distintos tamaños para ser reutilizables varias veces y se localizaban en el área de frutas y verduras.
En las carnicerías y pollerías hubo clientes que llegaron con sus envases o pequeños contenedores de plástico para que ahí depositaran la carne, la taparan y se la llevaban a su casa.
Mientras que las cocinas económicas colocaron letreros para informar a sus clientes que si querían comida para llevar, debían de traer sus contenedores o viandas, porque ya no podían vender los platos, vasos o charolas de unicel.
El comportamiento de los negocios y de los consumidores para no usar bolsas de plástico duró poco tiempo, pues después se introdujeron bolsas con la leyenda que son elaboradas con material reciclable, biodegradable y amigable con el medio ambiente.
En los supermercados solo regresaron este tipo de bolsas para la selección de frutas y verduras, pero en el área de cajas ya no más se entregaron las bolsas de plástico.
En algunas cadenas de tiendas de autoservicio se tuvo como alternativa las bolsas de papel, las cuales se entregaron solo a petición del cliente y debían de cubrir su costo, pues la mayoría de las veces los compradores no cargaban una bolsa de mandado.
También hay supermercados que entregan la mercancía en cajas de cartón que desocupan después de acomodar mercancía como sopas, jabones, frascos y otros artículos.
Como tercera opción surgieron las bolsas de tela que ofrecen en uno o dos tamaños, mismas que se distinguen por colores y el logotipo de la tienda.