Tras el reciente ataque de Estados Unidos a instalaciones nucleares en Irán, ocurrido el 21 de junio de 2025, las tensiones internacionales han escalado a niveles preocupantes. En respuesta, Irán lanzó misiles contra la base al-Udeid en Doha, Qatar, utilizada por tropas estadounidenses, lo que activó las defensas aéreas en ese país. Este panorama ha llevado a muchos poblanos a preguntarse qué tan segura sería Puebla en caso de una posible Tercera Guerra Mundial.
Para responder a esta inquietud, un chatbot de Inteligencia Artificial generativa (Grok) analizó factores geopolíticos, estratégicos y sociales, y arrojó un panorama que combina calma relativa con riesgos indirectos.
Según la IA, Puebla no es considerada un objetivo militar estratégico en caso de un conflicto bélico a gran escala, debido a los siguientes factores:
- Ubicación geográfica: Puebla está en el centro de México, lejos de fronteras internacionales, bases militares o instalaciones nucleares.
- Política exterior mexicana: México mantiene una postura de neutralidad y no intervención, sin alianzas militares activas como la Organización del Tratado del Atlántico Norte, también conocida como la Alianza Atlántica (OTAN).
- Infraestructura sin valor militar: En el estado no hay instalaciones consideradas objetivo por potencias extranjeras.
Esto convierte a Puebla en un lugar relativamente seguro ante una guerra global, al menos desde el punto de vista militar.

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¿Qué países están involucrados en la guerra mundial?
El conflicto actual fue desencadenado por el bombardeo de EE.UU. a las instalaciones nucleares de Fordow, Natanz e Isfahán en Irán, una operación realizada en conjunto con Israel. Esto ha provocado que potencias como Rusia y China han mostrado una postura crítica hacia Washington.
En este contexto, la tensión entre bloques internacionales ha incrementado la posibilidad de una guerra de mayor escala, lo que ha llevado a los usuarios en redes sociales a hablar de una “Tercera Guerra Mundial”.
¿Cuándo fue la Tercera Guerra Mundial?
Aunque no se ha declarado oficialmente una Tercera Guerra Mundial, los recientes ataques del 21 de junio de 2025 han sido considerados por muchos como el inicio informal de un conflicto global. La magnitud de los eventos y el involucramiento de varias potencias ha detonado comparaciones con las guerras del siglo XX.
¿Puebla estaría completamente a salvo?
No del todo. Aunque Puebla está lejos de ser un objetivo militar, la IA advierte sobre riesgos indirectos:
- Económicos: Una guerra afectaría el suministro global de petróleo, especialmente si se bloquea el Estrecho de Ormuz. Esto provocaría alza en combustibles, inflación y desabasto de productos.
- Migración: México podría recibir una oleada de refugiados, lo que presionaría a ciudades como Puebla.
- Efectos ambientales: Un conflicto nuclear podría generar radiación atmosférica que, aunque menos intensa, podría llegar hasta México.
- Sistema de emergencia limitado: Puebla cuenta con protección civil para desastres naturales, pero no con protocolos específicos para ataques químicos o nucleares.
- Redes sociales y ansiedad social: Aunque gran parte del contenido es humorístico o exagerado, sí se ha incrementado la percepción de vulnerabilidad.
Países más seguros, según la IA
La Inteligencia Artificial también elaboró una lista de países con mayores garantías de seguridad en caso de una guerra mundial, tomando en cuenta su neutralidad, ubicación geográfica y autosuficiencia:
- Nivel 1 (muy alta seguridad): Suiza, Nueva Zelanda, Islandia y Bután.
- Nivel 2 (alta seguridad): Uruguay, Finlandia y Costa Rica.
- Nivel 3 (seguridad moderada): Canadá y Australia.
México, según este análisis, se encuentra en una posición intermedia: aunque no es objetivo directo, su cercanía con Estados Unidos lo hace vulnerable a efectos colaterales.
¿Deberían los poblanos preocuparse?
La conclusión es clara: Puebla es relativamente segura, pero los riesgos indirectos son reales. Aunque las menciones sobre México como posible “daño colateral” han generado alarma, no existe evidencia de que el estado sea objetivo militar. Aun así, ante un escenario de conflicto prolongado, se recomienda a la población mantenerse informada y preparada ante posibles repercusiones económicas y sociales.