El Estadio Cuauhtémoc es la casa del Puebla de La Franja y un sitio emblemático tanto para los poblanos como para los visitantes que de hecho lo encuentran a la entrada de la ciudad.
Construido en 1968 con el financiamiento de la entonces Cervecería Cuauhtémoc Moctezuma, debe a ella su nombre y lo ha mantenido pese algunos intentos de cambio.
Pero ¿sabes quién es el dueño de este inmueble deportivo y qué implica esa posesión?
La respuesta es el gobierno del estado, quien desde hace varios años trabaja con esquemas de concesión para que la iniciativa privada se haga cargo de acciones como la seguridad y el mantenimiento.
La más reciente se lanzó a mediados de 2023, es por 15 años y busca garantizar el buen estado del inmueble y la continuidad de un equipo de fútbol en la Liga MX.
Antes de esta concesión se había tenido un contrato firmado en 2010 para 10 años con Fútbol Soccer S.A. de C.V., que tuvo ampliaciones en medio de la crisis de la pandemia.
Sin embargo, no siempre se ha tenido una relación cordial entre la administración estatal y los concesionarios como se observó en 2012 con el empresario Ricardo Henaine Mezher.
En medio de un proyecto de remodelación que implicó una inversión de más de 600 millones de pesos por parte del gobierno estatal, él incumplió el contrato en un intento de cambio de nombre a Miller House para que lo patrocinara otra cervecera.
En 2017 los problemas legales de Ricardo Henaine derivaron en que terminara por vender el equipo a Manuel Jiménez García y a otros socios que actualmente están a cargo de su administración.
La empresa Deportes Inc especializada en temas de consultoría y servicios deportivos señaló en 2018 que, además de Puebla, otros gobiernos estatales poseían estadios.
Un ejemplo es Veracruz con el Luis Pirata Fuente, Querétaro con el Corregidora, Pachuca con el Estadio Hidalgo, Morelia con el Estadio Morelos y el Victoria de Necaxa que en este caso es propiedad de un gobierno municipal.
Por otro lado, identificaron que hay inmuebles que son de empresarios como el Estadio Azul del Cruz Azul.
Hay otros más que son universitarios como el Estadio Olímpico Universitario de Los Pumas de la UNAM, el Universitario de Tigres y el estadio de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
Los consultores señalaron que para ese año había equipos en conflictos legales entre particulares como el Nou Camp de León y otros que son de los equipos representativos como el Estadio Azteca del América, el Corona de Santos, el Nemesio Diez de Toluca, el Caliente de Tijuana, El Akron de Guadalajara y el BBVA de Monterrey.