A través de un hilo de Twitter, la usuaria identificada como Carmen, (@carmenaceae) relató que vivió un asalto en la carretera Puebla-México, en el tramo que pasa por San Martín Texmelucan, antes de Río Frío. De acuerdo con su hilo, el método que utilizan es el de aventar algún objeto que pinche las llantas del vehículo; al percatarse, los conductores se orillan a cambiarla pero mientras lo hacen, son asaltados con arma de fuego.
La mujer relata que mientras transitaba a las 15:00 horas en la carretera Puebla-México, su llanta sé poncho, por lo que tuvo que orillarse a cambiarla. Al parecer no fue la única, cuenta que dos trailers, y otros tres coches, se encontraban en la misma situación, por lo que tuvieron que orillarse a revisar qué había pasado con su vehículo. Fue en ese momento cuando se percataron que, a tan solo 100 metros de donde se encontraban, estaban siendo asaltados dos vehículos.
Al ver la situación en la que se encontraban, lograron ver una patrulla de la policía, pero al parecer no los vio y siguió su curso.
“Hubo un momento donde vimos que se acercaba una patrulla de la policía estatal. Le hicimos señas para que se detuviera (fue imposible que no nos viera a nosotros y a los otros vehículos que estaban en la misma situación), pero se siguió de largo y derechito, qué sorpresa.” relató la usuaria.
Al concluir su hilo de Twitter, aconsejó a todos los usuarios: “si se les poncha la llanta en la carretera por un objeto sospechoso, mejor no se paren luego. Sigan lo más lejos que puedan antes de pararse a arreglarlo.”
Al final, este relato de terror no pasó a mayores, tal como lo cuenta la usuaria, la cual recomienda a los automovilistas que llegasen a pasar por una situación similar, prevenirse y sacar las tarjetas y “algo de dinero” antes de que te pidan la cartera.
Entre los comentarios, los usuarios también alertaron sobre esta carretera y compartieron experiencias similares.
“Gracias por compartir. Hace años, paré en Tres Marías, y unos minutos después de salir nos percatamos que traíamos un tornillo enterrado en una llanta trasera. "Casualmente" había una vulcanizadora cerca de donde paramos. Supongo que el tornillo fue colocado a propósito.”
“Lo siento mucho. Lo mismo nos pasó en el 2016. Se volvió muy común en esa autopista. Por lo que veo ahora son peores, antes era sólo en la noche.”
“Qué triste, unos compañeros tuvieron experiencia similar en el arco norte y se pararon, con violencia los asaltaron y a otro amigo en la de Celaya-Cortázar, no se paró hasta que de plano el coche no pudo más, la reparación ya va en 10 mil, pero es mejor para evitar el susto.”
