El asesinato de los sacerdotes jesuitas Javier Campos y Jesús Mora, así como del guía de turistas Pedro Eliodoro Palma Gutiérrez, el pasado lunes 20 de junio en Cerocahui, Chihuahua, causó conmoción.
Estos hechos hicieron recordar los casos de clérigos que también fueron privados de la vida en Puebla.
El 22 de febrero de 2011 se conoció el caso del padre Santos Sánchez Hernández, de 42 años de edad, quien ejercía su ministerio en la comunidad de Mecapalapa, municipio de Pantepec, ubicado en la Sierra Norte de Puebla.
Ese día, fueron los feligreses quienes encontraron el cuerpo del sacerdote, apuñalado y con signos de abuso sexual en la habitación que ocupaba a un costado del templo de San José, donde debía oficiar la misa de las 7:00 horas.
Por sus propios medios, poco después de las 8:00 horas, los pobladores abrieron el templo tras extrañarse porque no abría el padre, llevándose la sorpresa de encontrar el cuerpo inerte con varias puñaladas, una de ellas en la nuca.
Santos Sánchez tenía apenas ocho meses de haber sido transferido a esa localidad y era originario del municipio de Chicontepec, Veracruz. Por este hecho no hubo detenidos.
El 13 de junio de 2015, se registró la muerte del padre Erasto Pliego de Jesús, presuntamente a mano de tres sujetos, quienes previamente estuvieron conviviendo con él en la parroquia de Santa María la Asunción, en el municipio de Cuyoaco.
El párroco, quien estaba a cargo del templo Santa María de la Natividad, ya había denunciado entre los feligreses que miembros del crimen organizado lo tenían amenazado, principalmente el grupo identificado como “Los mariguaneros”, a quienes señalaba por hechos violentos en la región.
De acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE), tras la reunión, las tres personas sometieron al párroco y lo subieron a un vehículo para trasladarlo a un terreno baldío en el municipio de Nopalucan, donde lo mataron y le prendieron fuego.
Como presuntos responsables fueron identificados Yair Elihu N., Rogelio N. y Humberto N., quienes fueron detenidos.
El 22 de marzo de 2021, la FGE dio a conocer que Yair Elihu N. fue sentenciado a 35 años de prisión por el delito de homicidio calificado en contra del sacerdote. De los otros dos detenidos se desconoce su situación jurídica.
El caso más reciente tuvo lugar el 11 de abril de 2019 cuando se conoció la muerte del religioso Ambrosio Leocadio, de 78 años de edad, a cargo de la parroquia de El Señor de las Maravillas, en Puebla capital.
Una de las líneas de investigación fue el robo, pero ministeriales de la FGE no descartaron otras hipótesis al encontrar que el sacerdote fue torturado.
Respecto al robo se tiene como sospechosos a la sobrina del párroco y a su novio, quienes se presume le quitaron la vida para robarle la camioneta marca Toyota y otros objetos de valor.
Fueron los feligreses quienes cerca de las 15:00 horas del día siguiente llegaron a la casa del padre, porque no se había presentado a oficiar misa. Cuando ingresaron lo encontraron tirado, atado de pies y manos, con huellas de tortura y sin vida, en la entrada de su vivienda de la colonia Lomas 5 de Mayo.
De acuerdo con información del Centro Católico Multimedial, desde 2012 hasta el 20 de mayo de 2022, había 32 sacerdotes asesinados en México, a los que se suman los dos clérigos jesuitas.
También destacan las desapariciones de dos sacerdotes de los cuales se desconoce su paradero: Santiago Álvarez Figueroa, desaparecido desde diciembre de 2012 y Carlos Ornelas Puga, de quien no se tiene información alguna desde 2013.
-2012: Un caso en la diócesis de Apatzingán.
-2013: 5 casos. Dos en diócesis de Tuxpan, uno en la diócesis de Colima, otro en la diócesis de Ensenada y uno más en Ciudad Altamirano.
-2014: 4 casos. Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, diócesis de Ciudad Altamirano (dos casos) y diócesis de Atlacomulco.
-2015: 3 casos. Arquidiócesis de Morelia, arquidiócesis de Puebla y diócesis de Cuautitlán.
-2016: 3 casos. Dos en la diócesis de Papantla, uno en la arquidiócesis de Morelia.
-2017: 4 casos. Prelatura del Nayar, diócesis de Saltillo, diócesis de Nezahualcóyotl y arquidiócesis de México.
-2018: 7 casos. Diócesis de Chilpancingo-Chilapa (dos casos), diócesis de Izcalli, arquidiócesis de Guadalajara, diócesis de Zamora, arquidiócesis de México y arquidiócesis de Tijuana.
-2019: Un caso en la diócesis de Matamoros.
-2020: no reportó casos.
-2021: 3 casos. Diócesis de Cuernavaca, diócesis de Celaya y en la Prelatura del Nayar.
-2022: Un caso reportado hasta el 20 de mayo en la arquidiócesis de Tijuana. Dos más en Chihuahua.
