Este martes 16 de agosto entraron en vigor las reformas que tipifican la violencia vicaria como un delito y que establecen la pena de hasta 10 años y ocho meses de prisión a quien utilice a los hijos como chantaje o medio de presión para causar un daño a la ex pareja.

Es entonces a partir de este día que abogados y organizaciones civiles podrán argumentar esa figura jurídica para sancionar a los agresores.

Asociaciones como el Colectivo de Amorosas Madres contra la Violencia Vicaria tenían en el cajón alrededor de 30 denuncias, principalmente por sustracción de menores, que ahora las podrán hacer válidas y efectivas en los juzgados.

Ojalá que quienes han padecido esta forma de violencia, se trate de madres o padres, no lleguen a ser  revictimizados al acudir a los tribunales, como suele pasar en los casos de violencia familiar.

El balón está ahora en la cancha del sistema judicial. 

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Mensajes de alarma comenzaron a distribuirse a través de WhatsApp. Se trata de una supuesta advertencia de miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación para que la población se mantenga en toque de queda el próximo fin de semana, pues supuestamente habrá desmanes.

No es la primera vez que a través de redes sociales se difunden estos mensajes fake, cuyo único fin es crear miedo y zozobra entre la población.

Si bien no hay manera de saber cuando una amenaza de este tipo es fidedigna, lo cierto es que el crimen organizado actúa a veces incluso sin advertencias como sucedió en Ciudad Juárez y Tijuana.

Cierto también es que estos mensajes logran claramente su objetivo de generar pánico porque nadie puede negar que en Puebla se viven niveles alarmantes de violencia como consecuencia de la descomposición social que hay en el país.