Quien ya anda dando qué pensar es el diputado sin partido José Juan Espinosa Torres, pues está desaparecido.

Por meses nos tuvo acostumbrados a sus transmisiones dominicales desde Estados Unidos para opinar sobre todo tipo de temas políticos, pero ahora... nada.

¿Tendrá relación con que no regresó a las sesiones presenciales de Congreso por motivos de salud y ya hasta le exigieron un justificante del ISSSTEP?

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Y hablando de la LX Legislatura habrá que ver esta semana si nos sorprenden con aprobaciones pendientes en su última Sesión Ordinaria del 15 de julio.

Traen tanto congelado que la verdad lo único necesario es que se organicen y demuestren voluntad política de última hora.

De la ley de desaparición forzada estatal que ya debieron haber armonizado hace un rato, varios diputados han prometido que saldrá adelante

De las reformas tan rechazadas para despenalizar el aborto ahí si nadie ha querido asegurar nada con todo y que el tema ya pasó por un parlamento abierto a activistas.