Carlos Loret de Mola

La cifra de pobres no pasa el antidoping

Ahora, si sacas agua de un pozo o te la lleva una pipa, se considera que tienes agua. Entonces, el porcentaje de gente “sin agua” bajó de 16% a 3%

21/08/2025 |07:44
Carlos Loret de Mola
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En México, la pobreza se mide por dos factores: cuánto es tu ingreso y cuáles son los servicios que tienes. Si no te entran aproximadamente 4 mil pesos al mes y si no tienes cualquiera de los servicios básicossalud, agua, vivienda, etc.— eres pobre. El gobierno cambió el criterio de a quién se considera una persona sin agua en su vivienda. Ahora, si sacas agua de un pozo o te la lleva una pipa, se considera que tienes agua. Luego entonces, el porcentaje de gente “sin agua” bajó de 16% a 3%. Y por tanto, al final, hay menos gente pobre.

Este “truco” es uno de varios que especialistas —como Pablo Cotler de Desarrollo con Equidad o Gonzalo Hernández Licona de la Red de Pobreza Multidimensional— han detectado en el golpe propagandístico con el que el régimen ha querido tapar el alud de escándalos del verano: ¡López Obrador sacó a 13 millones de personas de la pobreza!

Ese número de 13 millones no pasa el antidoping.

Pero lo más lamentable es que el gobierno no tenía ninguna necesidad de inflar la cifra. La pobreza bajó. Incluso si le quitamos todos los “trucos” a ese dato, millones de personas habrán salido de la pobreza. Y eso es una gran noticia para México que por supuesto que el régimen y su partido tienen todo el derecho de presumir y cacarear. Pero les gana el apetito de la exageración y caen en la mentira. Y entonces, siembran una sombra de duda sobre lo que luce como un exitazo.

Los datos que ofreció el Inegi sobre cómo cayó la pobreza en México demuestran además algo que debería constituir una gran noticia para la presidenta Sheinbaum: lo que saca a la gente de la pobreza NO son los programas sociales, tanto como el aumento en el salario fruto de un aumento de más de 20% en el poder adquisitivo.

La presidenta, asfixiada por un endeudamiento que supera el 6% del PIB (que le dejó López Obrador y que le sirvió a ella para ganar las elecciones), necesita recortar el presupuesto. Los datos del Inegi le dan argumentos para recortar programas sociales, sobre todo los que se está demostrando que no ayudan a sacar a la gente de pobre y son tiraderos de dinero.

Claro, está la tentación electoral. Y ahí es donde rechina la maquinaria. Porque si algo ha aprendido Morena es que en una elección nada, nada, nada… como el cash.