Luego de quince años de un farragoso litigio que acumuló veinticinco expedientes, la Junta Especial número 10 de Conciliación y Arbitraje condenó en definitiva el pasado 13 de octubre al Sindicato de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares que dirige Napoleón Gómez Urrutia , a pagar a un grupo de trabajadores que lo acusó de desfalco, 54 millones 84 mil 470 dólares que la empresa Grupo México le entregó, vía un fideicomiso, para cubrir el cinco por ciento de las acciones que pertenecían a los obreros de la mina de cobre Mexicana de Cananea, liquidada en 2005.

Este laudo corrobora el emitido en abril pasado y contra el que se ampararon el hoy senador de Morena y su organización gremial, cuyo representante legal Nahir Velasco consideró ayer que la resolución de la Junta número 10 “es un proyecto” que debe ser revisado por un Tribunal Colegiado, por lo que interpondrá nuevos amparos para no pagar a los trabajadores la suma reclamada.

En medio de este conflicto que Gómez Urrutia asumió como una venganza del Grupo México de Germán Larrea y una persecución política del gobierno de Vicente Fox que lo llevó a un “autoexilio” en Canadá por más de doce años, la pregunta sigue siendo ¿a dónde fue a parar ese dinero que el líder minero deberá repartir a los obreros beneficiarios?

Desde el momento mismo en que estalló el conflicto, esta columna documentó la ruta que siguió el dinero, de acuerdo con las investigaciones de las autoridades de inteligencia financiera del gobierno foxista.

El 24 de enero de 2005 fueron pagados 47.4 millones de dólares de Minera México y 7.6 millones de dólares de Americas Sales Company, al fideicomiso F/9645-2 de Scotiabank Inverlat (ahora 10964526), mediante transferencia electrónica a una cuenta del Chase Maniatan Bank. Veintinueve días después, Gómez Urrutia protocolizó su extinción. El dinero fue transferido a dos cuentas del sindicato en Bancomer: 54 millones de dólares a una y el casi millón restante a la otra. Esta última fue aumentada con dos millones de dólares transferidos de la primera, para sumar tres millones de dólares. De ellos, 800 mil quedaron como saldo inmovilizado y dos millones 200 mil fueron sometidos a investigación.

Con los 53 millones de dólares de la primera de las cuentas se hicieron las siguientes operaciones: 1. Compra de moneda extranjera por cinco millones de dólares; 2. Transferencia de 14 millones de dólares a una cuenta del sindicato en el Citibank de Nueva York; 3. Inmovilización de un saldo de diez millones 200 mil dólares; y 4. Compra de pesos por el equivalente a 23.8 millones de dólares, en Consultoría Internacional Casa de Cambio.

Con los 252 millones 600 mil pesos que resultaron de esta última operación se hizo lo siguiente: 89.2 millones de pesos fueron depositados en una cuenta de HSBC, de la que se expidieron mil 707 cheques por 86.4 millones para pago a los trabajadores y en la que quedó un saldo de 2.8 millones; 54.4 millones de pesos se depositaron en una cuenta de Bancomer de la que se expidieron mil 696 cheques por 51.1 millones para pagar a trabajadores y en la que quedó un saldo de 3.2 millones; 95 millones de pesos se depositaron en una cuenta de Scotiabank de la que se expidieron mil 756 cheques por 89.2 millones, también para pagar a trabajadores, y en la que quedó un saldo de 5.8 millones; y 14 millones de pesos se depositaron en una cuenta del Laredo National Bank a nombre de María del Carmen Páez de la Garza Evia.

De lo anterior se desprende que el dinero presumiblemente entregado a los trabajadores equivale a 229 millones 800 mil pesos, un poco más de 21 millones de dólares. A los restantes 34 millones de dólares se le siguió la pista en 22 bancos de siete países.

Las autoridades de inteligencia del gobierno de Vicente Fox detectaron al menos cuarenta cuentas bancarias por poco más de 7.3 millones de dólares que Gómez Urrutia tenía a su nombre y al de su esposa Oralia Casso Valdés. A su nombre 22: ocho con un saldo de dos millones cuatro mil 227 dólares y catorce en ceros, pero con recientes transferencias por un millón 223 mil 976 dólares; y al de su esposa 18: seis con un saldo de dos millones 326 mil 374 dólares y doce en ceros, pero con recientes transferencias por un millón 768 mil 845 dólares. Las cuentas fueron encontradas en veintidós bancos de Ginebra, Londres, Jersey Island, Isle of Mann, Barcelona, Madrid, Bahamas e Islas Caimán.

Así la danza de los millones de “Napito”.

Instantáneas:

1. PAQUETE ECONÓMICO. Las comisiones de Hacienda y Estudios Legislativos del Senado convocarán a reunión el lunes próximo para dictaminar el paquete económico 2022 y someterlo al pleno el día siguiente. Se dictaminarán las minutas aprobadas por la Cámara de Diputados sobre la Ley de Ingresos, la Miscelánea Fiscal y la Ley Federal de Derechos . Hoy, por lo pronto, estarán en el Senado el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio; el procurador fiscal, Carlos Romero ; y la jefa del SAT, Raquel Buenrostro .

2. INQUIETUDES Y DUDAS sobre algunos puntos del paquete económico hay entre el grupo senatorial de Morena, según reconoce el presidente de la Comisión de Hacienda, Alejandro Armenta . Confió en que se despejen tras escuchar a los funcionarios de Hacienda. Armenta comentó que el tema de la inclusión de los jóvenes de 18 años al Registro Federal de Contribuyentes es muy sensible, por lo que habrá de revisarse y revalorarse.

3. PLATAFORMAS DIGITALES. La senadora por Morena Lilia Margarita Valdés presentó una iniciativa con proyecto de decreto para agregar a la Ley Federal del Trabajo un capítulo XI Bis sobre trabajadores de plataformas digitales. La legisladora considera que dichas plataformas deben ser reguladas por el Estado. Consultada al respecto, la plataforma Safeshopping considera que dicha propuesta va en contra de las sanas prácticas internacionales, pues la economía virtual requiere flexibilidad y no sobrerregulación. Advierte que su sobrerregulación hizo perder miles de empleos en España.

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