El conflicto generado por el relleno sanitario intermunicipal de Cholula ya escaló.
Este viernes, activistas acudieron a la Fiscalía General del Estado para denunciar que, al parecer, policías municipales les dispararon para dispersar la protesta que mantienen afuera del tiradero para impedir que vuelva a operar.
Pidieron el acompañamiento de un agente del Ministerio Público para recoger los casquillos que aún se encuentran en la zona, a fin de deslindar responsabilidades.
Los manifestantes llevan casi un mes en protesta afuera del relleno sanitario y aseguran que no se van a retirar hasta que se clausure, pues argumentan que el lugar es un foco de contaminación dado que recibe los desechos de 21 municipios. Ya veremos en qué acaba este conflicto.
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El caso del maestro acosador que grababa debajo de las faldas de las mujeres en la Feria de Puebla distribuía el material en canales de Telegram entre personas de Puebla y Tlaxcala.
De acuerdo con la información de organizaciones como DLR, el sujeto también suele residir en Oaxaca.
Tanto activistas como la Fiscalía General del Estado han pedido a las mujeres víctimas de Miguel N. que denuncien, pues sólo así podrán tener las pruebas necesarias para vincularlo a proceso.
Ojalá que ahora que ha sido plenamente identificado haya las denuncias correspondientes para poner fin a su acoso.
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La Fiscalía de Puebla informó que obtuvo la sentencia de 8 años de prisión contra Víctor Manuel N. culpable de delitos contra los animales mediante actos de crueldad, en lo que fue el primer juicio oral en esta materia.
El caso ocurrió el 25 de noviembre del 2020, cuando los dueños de Deck, un perro de raza Akita, salieron de paseo a un parque ubicado en las calles Victoria y Progreso de la colonia Guadalupe Hidalgo, de la ciudad de Puebla, donde soltaron a su mascota.
De momento, se percataron de que Víctor Manuel N. se le acercó al perro y lo lesionó en diferentes ocasiones con un objeto punzocortante. Lo trasladaron a una veterinaria donde fue intervenido quirúrgicamente, sin embargo, su salud siguió deteriorándose y días después murió.
Después de su detención y el análisis de las pruebas, el Tribunal de Enjuiciamiento lo sentenció a 8 años de prisión que cumplirá en un Cereso de Puebla. También deberá pagar 47 mil 500 pesos por daño material y 21 mil 720 pesos como pago de la reparación del daño moral. Por fin un castigo ejemplar.
