Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador, habló sobre el caso de la periodista Lydia Cacho y el contubernio entre Felipe Calderón y Mario Marín.
Ello, ante la posibilidad de que se le haya otorgado un amparo al exgobernador de Puebla para que salga en libertad.
“Yo estaba en la oposición en ese entonces y me manifesté a favor de Lydia Cacho. No se avanzó en la investigación en aquel entonces porque Marín le ayudó en el fraude a Calderón, así como lo están escuchando”, mencionó López Obrador.
El mandatario de la nación agregó que además de Marín Torres, a Felipe Calderón le ayudaron Natividad González Parás, de Nuevo León y Eugenio Hernández, de Tamaulipas.
López Obrador comentó que investigará si existe un supuesto amparo de Mario Marín para que salga de la prisión en Cancún o si tiene algún privilegio.
Reiteró a la periodista Lydia Cacho que “no somos iguales, que nosotros no protegemos a delincuentes, o a presuntos delincuentes, que tenemos autoridad moral”, reiteró.
El 3 de febrero del 2021, Mario Marín Torres fue detenido en Acapulco por elementos de la Fiscalía General de la República. Ese día fue trasladado a Cancún, para enfrentar un proceso judicial por la tortura cometida contra la periodista Lydia Cacho, quien señaló al político priista de ser cómplice de las redes de prostitución infantil.
Sobre este tema, el gobernador Miguel Barbosa expresó: “aquí hay que empezarle a investigarle a la gente cosas de Mario Marín, sí, sí, sí, hay que empezar. Es una vergüenza, una vergüenza para todo Puebla un gobierno de Mario Marín como lo fue, es una vergüenza y hay que indagar un poquito”.
Durante la videoconferencia de esta mañana, así respondió luego que fue cuestionado sobre la posibilidad de que el exgobernador de Puebla pueda dejar el penal de Cancún por dicho supuesto amparo.
Barbosa Huerta dijo que si Mario Marín obtiene su libertad, derivado de hechos cometidos en contra de Lydia Cacho, serán los jueces quienes lo resuelvan.
En tanto, añadió que sería una vergüenza que Mario Marín venga a Puebla y ande paseándose en el zócalo con sus prestanombres y demás.
“A eso se llama consentir el pasado y quedarse con esa vergüenza”, dijo el gobernador emanado de Morena.
El mandatario estatal también comentó que en el 2006, los gobernadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI), incluidos Mario Marín, se decidieron por Felipe Calderón y operaron en contra de sus propios partidos en completa deslealtad.
