La senadora de la República, Liz Sánchez, manifestó su total solidaridad con la comunidad migrante mexicana radicada en Los Ángeles, California, tras los hechos violentos y discriminatorios perpetrados por autoridades migratorias de Estados Unidos el día de ayer.
“La migración no es un crimen, es un derecho humano. No podemos permanecer en silencio ante la criminalización de quienes trabajan dignamente para sacar adelante a sus familias”, declaró.
La legisladora hizo un enérgico llamado a cesar las redadas que generan miedo, dividen hogares y atentan contra los derechos fundamentales de las y los connacionales que, lejos de representar un problema, contribuyen con su esfuerzo diario al desarrollo binacional.
Asimismo, reiteró su compromiso para defender, visibilizar y respaldar a la comunidad migrante, destacando que el respeto y la dignidad de las personas no deben tener fronteras.