Disfrutar de villas iluminadas en Puebla sin tanta gente y vivir la Navidad lejos de las aglomeraciones también es posible. El estado ofrece alternativas encantadoras donde la experiencia es igual o incluso más mágica, con Pueblos Mágicos que se han consolidado por sus ambientes navideños, espectáculos de luces y actividades familiares en un entorno más tranquilo.
En diciembre, Zacatlán se convierte en un escenario de cuento con su tradicional Villa Iluminada, una de las más emblemáticas de Puebla. Sus calles y plazas se cubren con túneles de luz, figuras decorativas y temáticas que invitan a recorrer el centro histórico sin prisa.
El ambiente frío, el aroma a ponche y los paisajes de montaña crean una atmósfera invernal que hace que diciembre en Zacatlán se sienta como una Navidad clásica.
Chignahuapan, famoso por su Feria del Árbol y la Esfera, suma una experiencia totalmente nueva con Illuminated Night World, un recorrido lleno de escenarios luminosos, figuras gigantes, zonas temáticas y espacios perfectos para fotografías.
Chignahuapan es ideal para quienes buscan un ambiente navideño sin saturación y con muchas opciones de recorrido.
Huejotzingo se suma a los destinos iluminados con una Villa Navideña instalada en la Plaza de Armas “Fray Juan de Alameda” y, por primera vez, también en Santa Ana Xalmimilulco.
Incluye:
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Del 28 de noviembre al 31 de diciembre se realiza la Feria de la Sidra, donde participan productores locales reconocidos por su Indicación Geográfica Protegida.
Con estas actividades, Huejotzingo se posiciona como un destino navideño perfecto para familias y visitantes que buscan un ambiente más tranquilo que Atlixco, sin sacrificar la magia decembrina.