En Puebla, la época de Navidad puede disfrutarse de diferentes maneras y con distintos atractivos, pero uno que, año con año, es el más visitado por turistas de distintos estados, es el árbol de Navidad estructural que hay en el Pueblo Mágico de Chignahuapan, considerado el más alto y grande de México.
Así es, la enorme estructura que se ubica en el centro de Chignahuapan, en la Sierra Norte de Puebla, no deja de sorprender a quienes lo conocen por primera vez, así como a los viajeros que gustan pasear en este municipio cada temporada de invierno.
El Pueblo Mágico de Chignahuapan es famoso por su alta producción de esfera de vidrio soplado, una artesanía que realizan decenas de talleres familiares y una importante fábrica para distribuir a nivel nacional estos adornos.
Como parte de su decorado para esta temporada de Navidad, la autoridad municipal coloca en el parque central una enorme esfera de herrería, junto a una gran estructura metálica que da forma al árbol.
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De acuerdo con el gobierno municipal, el árbol de Navidad de Chignahuapan mide 68 metros desde su base hasta la parte más alta, y no hay estructura semejante a ésta, lo cual lo convierte en la más alta del país.
Todo está decorado con cientos de metros de escarcha verde para darle forma, así como con más de 2 mil luces para iluminarlo, de manera que en las noches se pueda ver desde cualquier punto de la ciudad.
De manera ordenada, se han colocado figuras de fibra de vidrio con formas de regalos, bastones de caramelo, esferas, estrellas y otros adornos que los mexicanos colocamos en los árboles de Navidad que adornan nuestras casas o centros de trabajo.
En este Pueblo Mágico, mientras la gente camina por calles que lucen comercios repletos de cajas de esferas navideñas, coronas y otros adornos, a un costado de la parroquia dedicada a Santiago Apóstol, se puede tomar la fotografía con este gigante árbol navideño o al interior de la esfera.
Lo que pocas personas también saben es que este año la estructura del árbol de Navidad de Chignahuapan tiene un elevador que te lleva al mirador con vista 360 grados.
El elevador es operado por dos hombres, uno en el interior del ascensor y otro en la base del árbol; ambos se comunican con un radio para sincronizarse y hacerlo funcionar por medio de dos poleas.
Los usuarios cuentan con todas las medidas de seguridad, ya que les colocan arneses para que puedan caminar sobre el “andador de adrenalina” una vez que llegan a la parte más alta del árbol y así disfrutar de la vista de todo el Pueblo Mágico de Chignahuapan.
Conocer la belleza de Chignahuapan puede ser con luz de día o durante la noche, ya que el elevador funciona en los siguientes horarios:
Subir al mirador, por un elevador desde el interior del árbol de Navidad de Chignahuapan, no tiene costo, pero habrá que esperar tu turno.
En Chignahuapan, la Navidad es eterna. Además de conocer el proceso de elaboración de las esferas navideñas de vidrio soplado, también podrás disfrutar de su balneario de aguas termales.