Las cascadas de Hierve el Agua, en el estado de Oaxaca, son un atractivo impresionante que todo amante de la naturaleza debe conocer.

Este conjunto de cascadas petrificadas son reconocidas por su tono blanco y su magnitud, ya que superan los 200 metros de altura.

Surgieron hace millones de años debido al flujo de agua carbonatada, que se originó en los manantiales ubicados en la cima de la barranca. Estos manantiales, a su vez, forman un espectáculo singular: pozas de agua templada y de un característico color turquesa que sirven como balnearios naturales.

¿Por qué Hierve el Agua tiene propiedades curativas?

Según el blog Camino Real, debido a su elevado contenido de azufre y calcio, las aguas de este oasis poseen propiedades medicinales, ya que se cree que pueden tratar afecciones cutáneas como barros y caspa, así como aliviar problemas digestivos, entre otros malestares.

¿Cómo llegar a Hierve el Agua?

Para llegar desde la ciudad de Puebla, hay que tomar la autopista México-Puebla 150 en dirección a Tehuacán. Al pasar por Tehuacán, continuar por la autopista 190 con dirección a Oaxaca.

En Tehuantepec, tomar la autopista 179 con dirección a Guerrero y seguir las indicaciones que conducen a Hierve el Agua.

Una vez en Hierve el Agua, hay que pedir indicaciones para llegar a las cascadas. La distancia a recorrer es de 405 kilómetros y el tiempo de traslado es de casi 6 horas.

Aunque es un trayecto lejano, sin duda vale la pena, incluso para pasar al menos dos días en la zona.

Geográficamente, se ubica en la Sierra Mixe de Oaxaca, en la localidad de San Isidro Roaguía, en el municipio de San Lorenzo Albarradas.

¿Qué hacer en Hierve el Agua?

Hierve el Agua destaca por sus grandes bellezas naturales. Se ubica en el centro de una sierra que se caracteriza por su esplendorosa vista, así como por la blancura e inmensidad de sus cascadas, cuyas aguas cristalinas piden a gritos que te refresques en ellas.

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