A tan solo unas horas de la Ciudad de México y de Puebla, hay un lugar que parece sacado de una postal del mar Egeo: Rincón Santorini. Aunque se encuentra en México, este destino te hará sentir como si estuvieras en las islas griegas, sin necesidad de tomar un avión. Ubicado en el estado de Morelos, Rincón Santorini se ha convertido en una escapada imperdible para quienes buscan una experiencia mediterránea cerca de la capital.
Con arquitectura blanca, detalles en azul y vistas panorámicas desde lo alto de una colina, este lugar recrea fielmente la esencia de Santorini, Grecia. ¿Lo mejor? Puedes llegar en coche desde Ciudad de México o Puebla, lo que lo convierte en un plan perfecto para un fin de semana.
Rincón Santorini se localiza en Totolapan, Morelos, a 60 kilómetros de la Ciudad de México y aproximadamente 140 kilómetros de Puebla. Este desarrollo residencial y turístico fue diseñado para evocar la belleza y tranquilidad de la isla griega, pero rodeado de naturaleza mexicana.
Gracias a su ubicación sobre una colina, ofrece vistas espectaculares, ideales para descansar, tomar fotos y desconectarse del estrés urbano.
Este rincón mexicano no solo destaca por su apariencia, sino también por sus actividades turísticas:
Rincón Santorini no es un Pueblo Mágico ni una localidad tradicional, sino un desarrollo residencial con acceso público a algunas de sus áreas. Su diseño y arquitectura fueron planeados para recrear una atmósfera griega, con un enfoque estético muy atractivo para visitantes y compradores.
El acceso al lugar depende del tipo de experiencia que busques. Las actividades en el club, el consumo en restaurantes o el uso de algunas áreas privadas podrían tener costos asociados. Se recomienda llamar antes para verificar horarios y precios, ya que pueden cambiar según la temporada o el día de la semana.
Así que, si buscas una experiencia diferente cerca de la Ciudad de México o Puebla, Rincón Santorini es una opción única y accesible. Su diseño inspirado en Grecia, el ambiente tranquilo y sus atractivos turísticos lo convierten en el destino ideal para una escapada romántica, un paseo en familia o una sesión de fotos inolvidable.