Cuando escuchamos hablar de prismas basálticos la mente nos puede remitir al estado de Hidalgo, famoso por tener está formación rocosa.
Pero Puebla con su infinidad de paisajes y maravillas naturales no se podía quedar atrás.
Los prismas basálticos poblanos se ubican en el municipio de Zapotitlán Salinas y representan un singular atractivo para los amantes de la naturaleza y para los aventureros.
Es un lugar poco explorado a pesar de que es altamente atractivo por la visión que presenta y su origen. Un verdadero prodigio que se conformó a partir de un fenómeno natural.
La visita a los prismas basálticos puede considerarse como una opción para complementar un recorrido por la región de Tehuacán y disfrutar de la recién inaugurada temporada del mole de caderas.
En principio hay que considerar que el atractivo de los prismas basálticos se incrementa si se toma en cuenta que forman parte territorialmente de la Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán.
El sitio se ubica cerca de la cabecera municipal, a donde es posible aproximarse en vehículo, pero el trayecto se debe completar a pie por las condiciones del terreno.
Incluso, durante el recorrido es posible apreciar las estructuras y desde la cordillera, tomar fotografías.
De acuerdo con los especialistas, los prismas basálticos de Zapotitlán Salinas tienen su origen en la erupción de un volcán marino, hace aproximadamente 80 millones de años, cuando esa zona era mar.
Su extensión es de alrededor de cuatro kilómetros de prismas que cubren la superficie.
Hay varias rutas para poder acceder a ese sitio, sin embargo, la más corta lleva al centro de lo que se cree fue el cráter.
Un elemento a considerar es que las rocas que componen los prismas basálticos son cuarzos de andesita y minerales de olivino; esto debido a que el basalto es un material diferente, pero así es como se les conoce generalmente.
De acuerdo con la página de Turismo de Zapotitlán, estas formaciones pétreas son de la era Mesozoica y Paleozoica, que se han integrado de basalto con columnas prismáticas y alabastro calizo.
A fin de realizar un recorrido sin contratiempos, dado que se estima que se pueden caminar al menos 8 kilómetros a pie, es necesario vestir de manera adecuada y contar con el acompañamiento de un guía local.
Además, hay que considerar que la Reserva de la Biósfera de Tehuacán Cuicatlán, por sí misma tiene una amplia gama de atractivos.
Zapotitlán Salinas se ubica a 120 kilómetros de la ciudad de Puebla, al sur de Tehuacán, en plena Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán.
Para llegar se puede tomar la Carretera Federal 125, tramo Tehuacán-Zapotitlán Salinas y seguir los señalamientos que indican dirección a Oaxaca.