Tener una mascota en casa puede atraer mucha felicidad al hogar, pero es claro que existen diferentes animales domésticos que se pueden tener en una casa, uno de los que más ha tomado popularidad en los últimos años es el gato.
Considerado una mascota para las personas que tienen poco tiempo de descanso y tienen gran parte del día ocupado, esto debido a que el gato es un animal que requiere menos atención y cuidados que un perro, sin embargo, no todo es lo que parece.
Es cierto que los gatos no necesitan tanta atención como un perro, pero es seguro que tiene cuidados específicos que deben cumplirse para que tu mascota se mantenga saludable y lo más interesante es que estos cuidados tienen beneficios para el dueño.
Los beneficios de tener un gato en casa
Los gatos no solo necesitan su caja de arena y platos de comida y agua, nuestro felino necesita que juguemos con él, lo acurruquemos, le demos cariño y que tenga espacios para poder explorar, pasear y brincar pues son animales muy curiosos.
Aunque parezca que estas tareas pueden ser pesadas, estudios han demostrado que cumplir con las necesidades de nuestro gato podría atribuir beneficios a nuestra salud, la mayoría de ellos son a la salud mental como puede ser:
- Reducir el estrés
- Al reducir el estrés se mejora la tensión arterial
- Reforzar el sistema inmunológico
- Mejorar tu salud mental
- Reducir el riesgo cardiovascular
- Mejorar el estado físico
- Ayudar con la sensación de soledad
- Aumentar los niveles de bienestar
- Calmar los nervios y la ansiedad
- Sensación general de calma
¿Qué necesito para adoptar a un gato?
Si estás dispuesto para conseguir a un gato, se debe tener en cuenta que tu hogar deberá ser adaptado para que tu nuevo felino pueda tener una vida cómoda y feliz, además de las atenciones médicas que requiere cualquier mascota.
- Controla que tenga todas las vacunas y que esté esterilizado.
- Cierra ventanas y lugares por los que podría salir del hogar.
- No dejes bolsas de basura en las que pueda ingresar por curiosidad
- Cierra las puertas de tus electrodomésticos
- Que no haya cables que los puedan lastimar.
- No encender velas a menos que estés en el lugar.
- Elimina restos de comida que estén al alcance del gato.
- Mantén rascadores y postes de rascado para que tus muebles estén en buen estado.
- Esconde cualquier tipo de sustancia peligrosa.
- Mantén sus areneros limpios y con arena fresca.
