es una piloto de motocicletas de velocidad que tuvo que salir de Venezuela hace 11 años por los problemas sociales de su país, pero en Estados Unidos consolidó su carrera como deportista extrema y empresaria.

“El secreto de haber logrado convertirse en una competidora profesional de motociclismo de velocidad ha sido no ponerse límites”, señaló la piloto quien es conocida en redes sociales por su nombre y número de competidora, .

Su consejo para las jóvenes que sueñan con ser pilotos profesionales es no dejarse llevar por las personas que les dicen que no lo van a poder hacer.

"Hay mujeres que se ponen límites, pero te los pones tú mismo. Yo mido 1.60 y domino una moto 1100. Si yo pude, cualquier mujer si de verdad le apasiona lo va a poder hacer igual que yo y hasta mejor”, afirmó en entrevista.

Marianny se dio a conocer en 2011 por hacer piruetas en una moto de alta cilindrada y actualmente tiene una línea de cascos en Brasil en sociedad con la empresa Axis, así como otros productos de motociclismo.

“Me caracterizan las colitas del casco. Me gusta ser muy femenina, mi foto es rosada, mis colitas en el casco han sido un boom. Estando aquí fue que surgió mi línea de cascos en Brasil y ha sido un éxito”, explicó.

Convertirse en empresaria no fue fácil para Marianny, pues recorrió un camino de aprendizaje para conseguir el producto de acuerdo con sus requerimientos y que además fuera rentable.

“Fue investigación, dar con la empresa que pudiera hacerlo, pero gracias a dios se logró. He ido a varios eventos a Brasil y ha sido totalmente increíble. Me reciben con ese cariño y el apoyo de comprar un casco que dice mi nombre y mi número”, narró.

En los inicios de su carrera incursionó en Motocross, pero al poco tiempo descubrió las competencias de velocidad, lo que la llevó a participar en Cuarto de Milla y en pista.

“Cuando yo empecé en Venezuela no había muchas mujeres que manejaran moto, yo iba a estos eventos y en racing de superbike era la única mujer que llegaba manejando una foto era yo”, recordó.

El haberle abierto el camino del motociclismo a las demás mujeres en Venezuela le ha valido ganarse el cariño de muchas personas que a raíz de ella se atrevieron a participar en esta disciplina.

“Ahora en Venezuela hay una comunidad de chicas que manejan moto y para mí eso me llena de orgullo”, dijo Marianny.

En 1916, al cambiar su residencia a Miami, Estados Unidos, recuerda haber tenido un inicio que no fue fácil, pero se ha ganado el respeto al demostrar que es una buena piloto.

“Aquí empecé a manejar profesionalmente en competencias de pista. Mi primera carrera fue en el 2018 hice el primer y tercer lugar y yo era la única mujer y aunque yo me siento capaz y soy muy buena piloto, el orgullo de ganar una carrera contra hombres es de verdad increíble”, narró.

Los retos no terminan ahí para Marianny, pues como atleta extrema también gusta de las bicicletas de montaña y de ruta.

“El tema que tenga que ver con dos ruedas, ahí estoy yo”, afirmó la deportista, quien tiene presencia en Instagram con su perfil y cuyos productos pueden adquirirse en su página web .

Google News

TEMAS RELACIONADOS