La búsqueda de Camilo, un perro labrador negro robado junto con un auto en Tehuacán, mantiene en alerta a vecinos y usuarios de redes sociales. El caso ocurrió el pasado 8 de noviembre, cuando un Chevy gris metálico, modelo 2001 y con placas TYE-56-46, fue sustraído en la colonia La Purísima, con la mascota dentro del vehículo.
Según la denuncia difundida en redes, los hechos se registraron en la Privada Amado Nervo esquina con Josefa, donde el dueño del automóvil dejó estacionado el coche por unos momentos. Al regresar, el vehículo y el perro ya no estaban.
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El usuario William Hernández compartió en redes sociales un mensaje que rápidamente se viralizó:
“Ya se hizo la denuncia oficial y la difusión en todos los medios, pero nuestro Camilo sigue sin aparecer. Pedimos el apoyo de toda la comunidad. Si tienes cámaras cerca de la zona, por favor revísalas. Ofrecemos recompensa por cualquier información que nos ayude a encontrarlo”.
Camilo es un labrador negro de siete años, de ojos color café claro, dócil y muy cariñoso. Al momento del robo, llevaba puesta una camiseta de fútbol, lo que podría ayudar a identificarlo fácilmente.
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Los dueños piden a la población revisar cámaras de seguridad y reportar cualquier pista a los números 238 290 1067 y 238 373 2522.
De acuerdo con los reportes, el robo se registró en la colonia La Purísima, una zona donde vecinos han denunciado en otras ocasiones robos similares. La familia ya interpuso una denuncia ante las autoridades locales, aunque por ahora no se ha informado de alguna recuperación del vehículo ni del perro.
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Expertos en seguridad recomiendan que, ante el robo de un vehículo, se sigan estos pasos:
1. Llamar al 911 para registrar el hecho.
2. Denunciar ante la Fiscalía General del Estado (FGE) con los datos del vehículo.
3. Compartir la información en redes sociales, con fotografías, placas y detalles visibles.
4. No ofrecer recompensas públicamente sin precaución, ya que podría atraer a personas malintencionadas.
El caso ha generado una ola de solidaridad en redes sociales. La familia insiste en que cualquier dato, por mínimo que parezca, puede ayudar a recuperar tanto el auto como al perro, que consideran un miembro más del hogar.