Sin competir en la contienda del 6 de junio, el exdirigente estatal del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Gabriel Biestro Medinilla fue uno de los actores más polémicos de la campaña y es pieza clave en el proceso de renovación en la dirigencia de este partido.

El también expresidente de la Mesa Directiva del Congreso local llevó a los tribunales federales su inconformidad ante la selección de Claudia Rivera Vivanco como candidata a la presidencia municipal de Puebla.

Tras la derrota de la alcaldesa en su intento por reelegirse, Biestro Medinilla ha sido también uno de los más críticos sobre el futuro de Morena e incluso ha levantado la mano para volver a encabezar este instituto en Puebla.

En entrevista con , Biestro Medinilla nos comparte cómo ve a Morena después de las elecciones y nos habla sobre su paso por el Congreso y su futuro político.

¿Cómo ve a Morena Puebla después del 6 de junio de 2021?

Morena sigue siendo un gran factor político, sigue teniendo ese voto de confianza. Yo siempre dije que Morena, más allá de ser un movimiento, un partido, era una idea, la idea que la gente tiene sobre lo que debe ser la política.

Creo que todavía, pese a diversas situaciones que se dieron, la gente lo demostró, le dio el voto de confianza al presidente para el Congreso federal, le dio el voto de confianza al gobernador y en una elección además que vemos totalmente diferente a las que veíamos desde que nacimos.

Es una elección donde por primera vez no se ve una operación del Estado, del gobierno, que hayan metido la mano. Yo recuerdo cuando hacíamos la reforma electoral, en el Congreso, a mí me preguntaban inclusive los medios si no nos estábamos dando un tiro en el pie y decía no, es lo que siempre prometimos y es lo que siempre dijimos que se tenía que hacer.

¿Qué sigue para el partido después del proceso electoral?

Es un momento donde tiene que haber un gran diálogo interno, una revisión, una evaluación de lo que estuvo bien y de lo que estuvo mal,  porque así como han habido buenos gobiernos, han habido malos gobiernos y la gente lo sabe.

Distinguir de manera precisa y de manera correcta y yo creo que mientras los gobiernos tengan identidad obradorista, con el proyecto de la 4T, son gobiernos que van a tener garantizada la confianza de la ciudadanía.

¿Cómo evaluar lo observado en los municipios perdidos?

-Desde siempre, nuestro punto fuerte eran las zonas urbanas, las áreas conurbadas y esta vez, bueno, pues lamentablemente se pierde.

Creo que es ahí donde se debe hacer una verdadera evaluación, ver qué identidad tienen los gobiernos con el mensaje que estuvimos dando a la ciudadanía durante más de 10 años. Esa congruencia entre lo que se dice y lo que se hace y eso la gente lo nota.

Yo espero que pronto llegue al municipio de Puebla esta transformación, que llegue un gobierno obradorista, un gobierno de izquierda y que demuestre todos esos postulados que siempre tuvimos, como "por el bien de todos, primero los pobres", como el tema del combate a la corrupción, como el tema de escuchar a la ciudadanía.

¿Cómo califica la legislatura local saliente?

Híjole, fue una legislatura, lo puedo decir sin temor a equivocarme, histórica. Fue una legislatura única, le tocaron toda una serie de acontecimientos tremendos que tuvo que sortear y hablo de la legislatura como todo el conjunto de todas las fuerzas políticas, no nada más a Morena o al PT.

Hubo momentos de decisión, momentos clave donde el Congreso fue factor de estabilidad, momentos muy difíciles dejando a un lado cualquier tipo de color o pretensión política. (Tuvimos) momentos complicados, vivimos con cinco gobernadores diferentes, en el inicio de la legislatura nos enfrentamos a la elección de un gobernador interino, a una elección extraordinaria, después vino el tema del Covid y las primeras sesiones en línea de la historia, hacer esa reforma urgente para no detener los trabajos.

Es el Congreso que quitó de verdad el fuero. Se puede ver a nivel nacional lo que está pasando con temas tan vergonzosos, tan terribles como el de Saúl Huerta. Si él hubiera sido diputado de Puebla ya estaría en este momento tras las rejas enfrentando un proceso. Entonces nosotros quitamos el fuero en Puebla, hicimos muchísimas cosas que hace dos tres años eran impensables ¿Quién iba a decir que el Congreso de Puebla iba a aprobar la Ley Agnes o el matrimonio igualitario? Muchas cosas, muchos avances.

¿Por qué ya no volvió a la recta final del Congreso?

Más allá de la cuestión de un puesto es un tema de estar trabajando por lo que uno cree y por lo que uno piensa, porque por ahí decían que si yo traía pleito con Morena, nada de eso, nunca, no es eso.

Yo siempre he sido una persona que defiende sus puntos de vista, sus principios y por eso entré, porque aunque Morena todavía no era partido, el ejemplo de López Obrador cuando se quejaba de todo lo que pasaba en su entonces partido, lo que pasaba en el país, nos ha enseñado a hacer esas cosas y creo también que quien es mi suplente es una persona que lleva muy puesta la camiseta obradorista, muy puesta la camiseta de Morena y aquí lo que importa es ese trabajo de equipo, ese trabajo institucional más que de una persona como tal.

Lo que necesitamos son cuadros nuevos, cuadros que vengan de esa generación obradorista, que es muy importante para mí más allá de seguir conservando una posición política.

¿Qué sigue para Gabriel Biestro a futuro?

He estado más tiempo sin un puesto que con él, así que desde donde uno esté, el punto es seguir luchando por construir esa transformación que durante tantos años buscamos. Hoy esa transformación es una realidad, la construcción de esa transformación y esté desde donde esté la voy a llevar adelante.

¿Le interesa repetir en la dirigencia estatal?

Todo mundo, sobre todos los que venimos desde hace años en esta lucha, queremos ser protagonistas de la construcción, de esa transformación, los que somos de a de veras, los que construimos de verdad todo ese sueño pues queremos estar como protagonistas del cambio verdadero.

Claro que sí, pero también hay que ver en qué condiciones se están dando las cosas, si es algo que abone, si es algo que prometa, entonces claro que sí.

¿Cuáles tendrían que ser esas condiciones para buscar la dirigencia?

En primer lugar tiene que haber condiciones de legalidad, de igualdad para la contienda interna, pero sobre todo de respaldo, unidad. Yo conozco a muchos con quienes formé Morena desde hace más de 10 años -todavía no era ni partido político - y en todas esas personas hay un ánimo en ese sentido, que muchos me lo han manifestado.

Además, condiciones que garanticen que el resultado va a ser un tema de fortalecimiento y de unidad para el instituto. Esas son cosas que se tendrán que ir evaluando, sin que sea obviamente un punto forzoso en mi plan, en mi proyecto. Finalmente el proyecto es este, la 4T, no es una persona, no es personal, es algo con lo que luchamos mucho tiempo y que nos va a trascender.

¿Cómo unir al partido con los pleitos que se vieron en campaña?

No para nada, pelea no hay. Decía hace un momento, yo defendí lo que consideré que era mi derecho, que había sido un atropello, que había habido una actitud -y no del partido- es más, yo siempre pedí que la dirigencia nacional metiera orden en lo que estaba pasando en Puebla. Ahí hubo una serie de actitudes y acciones que son totalmente contrarias a la esencia del partido. Entonces lo que hice fue defender mis derechos, pero para empezar aquí nada es personal y lo que no queríamos que pasara es lo que al final pasó, que se entregara la plaza de regreso a la derecha, porque sabemos que esa no es ninguna solución. Lo queríamos evitar, finalmente no se pudo pero no importa, no se trata de una cuestión de pleito, se trata de una cuestión donde yo, haciendo uso constitucional jurídico, me defendí y ya pasó.

Es más, el propio Tribunal me da la razón, pero pues ya muy a destiempo, muy a deshoras, pero no importa, porque digo yo entré a Morena antes de que fuera partido político y entré precisamente porque no era partido político, por ese afán, por ese espíritu de cambiar las cosas que hoy se están dando y lo que queremos hacer es que no vaya a haber un retroceso, que la gente no crea que un mal gobierno de Morena quiera decir que el proyecto que siempre defendimos está mal. Cada quien respondemos por lo que hicimos, por lo que dejamos de hacer.

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