México se encuentra en una de las regiones sísmicamente más activas del mundo al interactuar cinco placas tectónicas en un solo lugar, la placa de Norteamérica, de Cocos, del Pacífico, de la Rivera y la del Caribe.

La Placa de Cocos, en el Océano Pacífico, produce la mayor cantidad de sismos al hundirse (subducción) por debajo de la Placa Continental de Norteamérica, de acuerdo con datos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Una de las técnicas que las autoridades federales han empleado a manera de prevención es contar con el Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (SASMEX) que detecta los temblores importantes en la brecha de Guerrero con segundos de anticipación.

La Alerta Sísmica funciona desde 1993, pero en ese entonces se daba el aviso a la población mediante las estaciones de radio y televisión de la Ciudad de México y en algunas ciudades con cobertura.

Su función inicia así:

-Se presenta un sismo

-Se detecta en la zona de cobertura

-Se calculan intensidades y seleccionan ciudades a alertar

-Se utilizan antenas de radio para enviar y recibir la señal a la velocidad de la luz

Para 2008, la difusión de los mensajes fue a través de radios con protocolo multi-alerta EAS-SAME (Emergency Alert System- Specific Area Message Encoding) como los que emplean las instituciones de emergencia en varios países del mundo.

Debido a que las alertas tenían retardos, México incorporó una red de sensores que al detectar un sismo fuerte emite una señal que utiliza ondas de radio y funciona con un tiempo variable de anticipación.

Mantiene un sistema continuo de monitoreo y supervisión automático los 365 días del año.

Al principio los receptores multi-alerta EAS-SAME se instalaron en escuelas de educación básica y edificios de gobierno.

Este sistema comenzó con 12 sensores, conforme pasó el tiempo se llegó a 37 y a partir de 2012, cuentan con 97 sensores sísmicos a lo largo de Bahía de Banderas (Jalisco) hasta el Istmo de Tehuantepec (Oaxaca), incluyendo la región del Alto Balsas, en Guerrero, sur de Puebla, centro y norte de Oaxaca.

Desde el 19 de septiembre de 2015, el sonido oficial de la alerta sísmica SASMEX es escuchado a través de los altoparlantes por la población de ocho ciudades: Oaxaca, Guadalajara, Ciudad de México, Colima, Acapulco, Chilpancingo, Morelia y Puebla.

Estos avisos otorgan desde 20 hasta 120 segundos de tiempo de oportunidad aproximadamente, antes de la llegada de un sismo, dependiendo de la distancia al epicentro y las primeras detecciones de las estaciones.

Los sensores monitorean las zonas de peligro sísmico y reconocen los temblores en un radio próximo a 90 kilómetros. Estiman en los primeros segundos su posible magnitud.

De manera que la alerta sísmica beneficia a más de 25 millones de personas en zonas de riesgo sísmico.

Cuando un sismo se registra lejos de la zona de cobertura de detección del SASMEX, no amerita aviso de alerta, toda vez que está muy lejos de la ciudad y no representa un riesgo. Tampoco se activa cuando las estimaciones de la energía del sismo no rebasan los niveles establecidos.

El tiempo de anticipación dependerá de la distancia entre el sitio donde inicie el sismo y la ciudad a alertar.

Por ejemplo, si ocurriera un sismo en la costa de Michoacán, como el que se registró el 19 de septiembre de 2022, de magnitud 7.7 grados, se tendría un tiempo de oportunidad de más de 100 segundos para la Ciudad de México, pero en las ciudades cercanas al origen del temblor, tendrán un tiempo menor.

El sonido de la alerta sísmica, tal como este 19 de septiembre de 2022 se escuchó cerca de las 13:05 horas, se diseñó en 1993, se buscó que fuera único e inconfundible con otros sonidos utilizados en emergencias.

Al ser un sonido oficial es de uso restringido, de acuerdo a la normatividad de la Ciudad de México, de manera que su uso indebido es sancionado de acuerdo al Artículo 25, Fracción IX, de la Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México y el Artículo 222 fracción IV del Reglamento de la Ley de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil.

El SASMEX, desarrollado en México con tecnología moderna, es reconocido como la primera alerta sísmica en el mundo y pionera en el desarrollo de alertamiento sísmico de vanguardia.

De acuerdo con SASMEX, se ha intentado utilizar aplicaciones móviles o apps como otro medio de difusión para recibir avisos de alerta sísmica, pero dependen en su totalidad de una conexión a internet a través de red de datos o Wifi, lo que genera retrasos variables e implica reducción en el tiempo de oportunidad para la prevención.

Actualmente no hay tecnología que permita predecir los sismos, ni los países como Estados Unidos o Japón, cuya tecnología es muy avanzada.

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