Durante el 2025 hubo diversos efectos por el clima en Puebla, tanto un calor sofocante como lluvias torrenciales que provocaron inundaciones y deslaves. Tomando en cuenta esas condiciones, ¿qué nos espera en 2026?
El clima en Puebla se caracteriza por ser cambiante en un solo día, a pesar de ser considerado templado subhúmedo con lluvias en verano, una persona puede sentir calor en el día, aire fresco por la tarde, mucho frío por la noche y hasta helado.
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¿Cómo fue el clima en Puebla durante 2025?
En cuanto al calor, los registros de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) refieren que en Puebla hay un aumento de temperatura, pero aún no se encuentra entre las entidades más calurosas del país, por lo que el estado se ubica en el lugar 13 a nivel nacional en incremento térmico.
En abril, municipios del interior del estado como Piaxtla, Chila de la Sal, Teotlalco y Venustiano Carranza reportaron temperaturas por arriba de 35 grados Celsius y el 19 de mayo, la ciudad de Puebla alcanzó una temperatura máxima de 29 grados y la noche también fue calurosa. En la zona de Atlixco, en mayo el termómetro registró una temperatura máxima de hasta 32 grados.
En resumen, el verano 2025 en Puebla se caracterizó por un calor significativo, con picos por encima de los 35 grados en varias regiones y temperaturas más altas de lo habitual, especialmente durante la canícula.
¿Cuánto llovió en Puebla durante el 2025?
Las lluvias se concentraron de junio y septiembre, siendo julio y agosto los más lluviosos, de acuerdo con datos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN). Las precipitaciones pluviales fueron generadas por la presencia de los sistemas de baja presión, ondas tropicales y ciclones que se formaron en el Océano Pacífico y el Golfo de México.
En la ciudad de Puebla, de acuerdo con datos del SMN, las lluvias máximas por año aumentaron un 15 por ciento, lo que ha motivado inundaciones y deslaves en la ciudad de Puebla y las zonas serranas.
Durante la temporada de lluvias, en la ciudad de Puebla se contabilizaron al menos 45 colonias como zonas de alto riesgo por inundaciones, así como principales avenidas al norte, oriente y sur de la ciudad.
Calles y vialidades como Bulevar Forjadores, Carmelitas y Esteban de Antuñano quedaron con hasta 70 centímetros de agua durante la temporada de lluvias, dejando autos varados y complicaciones viales en varias horas del día.
Además, muchas zonas bajas y con drenaje insuficiente quedaron expuestas a anegaciones y cortes momentáneos de movilidad en horas de lluvia intensa.
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Deslaves en la Sierra Norte enlutaron a Puebla
Aunado a las lluvias, se presentaron deslaves que enlutaron a Puebla, pues hubo 22 personas fallecidas y un menor de 6 años desaparecido, debido a lluvias extraordinarias que se registraron el 9 de octubre de 2025 y que afectaron también a localidades de Veracruz, Hidalgo, Querétaro y San Luis Potosí.
En territorio poblano, las fuertes lluvias afectaron 38 municipios y 66 comunidades de la Sierra Norte de Puebla, de los cuales 23 reportaron viviendas sepultadas por lodo, carreteras y caminos bloqueados, y personas incomunicadas.
Municipios como Huauchinango, Xicotepec, Pahuatlán, Tlacuilotepec, Zacatlán y otros municipios serranos sufrieron desbordamientos de ríos, daños en viviendas y la muerte de personas.
¿Cuáles es el pronóstico del clima para el 2026 en Puebla?
Las proyecciones para el 2026 anticipan temperaturas altas continuas, lluvias prolongadas y riesgo de eventos extremos de inundación y deslaves.
La temperatura máxima para el verano, a diferencia del 2025, no se prevé que aumente. En junio de 2026, se espera que las máximas promedio alcancen alrededor de 26–27 grados, mientras que entre julio y agosto serán de 22–24 grados Celsius.
Conagua ha advertido que el patrón de lluvias intensas de 2025 podría extenderse hasta 2026, prolongando la temporada de lluvia más allá de lo normal, lo que sugiere que el riesgo de inundaciones vuelvan a presentarse, especialmente de junio a octubre, en zonas urbanas de la ciudad de Puebla y área conurbada, y en las Sierras Norte, Nororiental y Negra.
Las proyecciones refieren que los municipios de Huauchinango y Teziutlán deberán estar atentos ante la probabilidad de experimentar lluvias intensas que, aunado a la orografía de esos municipios, pueden favorecer casos de deslaves.
Estas zonas tienen terrenos montañosos, suelos susceptibles a saturarse con lluvias intensas y, por ende, alto riesgo de deslizamientos y derrumbes.
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