Tras el sismo del 7 de septiembre, de magnitud 7.1, hubo saldo blanco en Puebla, pues no hubo pérdidas humanas ni daños materiales de consideración.
El gobernador Miguel Barbosa Huerta informó que en hospitales sólo hubo cristales rotos y en escuelas no se reportaron afectaciones.
Expresó que, como todos los siniestros naturales, el sismo tomó por sorpresa a la población.
“Ya que nos suelten tantito, ya. Debemos estar tranquilos en Puebla, y este sismo nos sobresaltó sin duda. Afortunadamente no fue como aquellos que han provocado daños fuertes”, señaló.
Indicó que anoche, cerca de las 21:30 horas, recibió la llamada del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador y de inmediato comenzaron a tomar referencias de todo el estado.
Por su parte, Ana Lucía Hill Mayoral, secretaria de Gobernación, informó que tras el sismo se aplicó el Sistema Estatal de Protección Civil para monitorear el interior del estado y revisar la infraestructura crítica que se mantiene operando con normalidad.
Coincidió que solo se registraron daños menores con afectaciones en acabados y rompimiento de cristales.
Agregó que hoy, aprovechando la luz del día, se hará un segundo recorrido para descartar daños adicionales.
Detalló que el sismo del 7 de septiembre de 2021 fue a las 20:47 horas, con una magnitud de 7.1. Se localizó a 11 kilómetros al sureste de Acapulco, Guerrero y tuvo una duración de 150 segundos.
Hasta las 5:00 horas de este miércoles el Servicio Sismológico Nacional había registrado 150 réplicas.
