Desde 2019 y más ahora que se especula rumbo al 2024, el nombre de Fuerza Migrante ha sonado como una posible nueva opción política y atrás de ella está un poblano, Jaime Lucero.
Tanto en entrevistas como en perfiles públicos se menciona que el empresario dejó México en 1975 para migrar hacia Estados Unidos y el primer empleo que consiguió llegando a Nueva York fue como lavaplatos, sin saber hablar inglés y en búsqueda de mejores oportunidades económicas.
Antes de irse de manera ilegal a los 18 años, trabajó en un taller de autos, por lo que, cuando en el restaurante donde trabajaba se descompuso un camión, apostó sus ahorros para pagar un enganche y el resto lo solventó en pagos.
Esa primera unidad le permitió incursionar en el negocio de los traslados y para 1985 pudo fundar una empresa formal de transportes a la que nombró Gold and Silver Logistic, en memoria de su mamá que vendía joyas de casa en casa.
Según datos de la empresa, para 2002 se apostó a la industria de la maquila de textiles y para el 2020 las prendas comercializadas alcanzaron 8 mil puntos de venta en Estados Unidos con 4 mil empleos indirectos.
En los tiempos de Vicente Fox Quesada y Melquiades Morales Flores impulsó con otros empresarios poblanos el proyecto comercial de Casa Puebla.
A la par, en años siguientes, la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY) le puso su nombre a un Instituto de Estudios Mexicanos y el Lehman College de la misma casa de estudios le dio el grado de Doctor Honoris Causa.
Sin embargo, la incursión política a través de la organización Fuerza Migrante creció en el 2019 y el mismo Lucero ha expuesto que surgió ante una crisis de los derechos de los migrantes mexicanos.
Desde su perspectiva, en Estados Unidos los ven como un botín político para decisiones políticas, mientras que en México se les ve como cajeros automáticos por las remesas que generan y los acercamientos con políticos que no concretan beneficios.
Hace tres años, Jaime Lucero expresó su interés por convertir esa organización en un partido político e incluso Fuerza Migrante impulsó ante el Instituto Nacional Electoral (INE) las diputaciones federales migrantes que se votaron por primera vez en 2021.
Mientras que en el 2020 encabezaron diferentes acciones para apoyar a los migrantes económicamente y con acceso a servicios médicos ante la pandemia de Covid-19.
Hasta el año pasado iban por la ruta de trabajar como asociación política que en el caso de México y las reglas del INE es la antesala para conformarse posteriormente como un partido político.
El lunes pasado que Eduardo Rivera Pérez presentó su primer informe de gobierno, este líder migrante fue presentado entre los asistentes con peso político en el país.
