Este domingo 6 de marzo, San José Miahuatlán, Teotlalco y Tlahuapan volverán a las urnas para elegir a sus presidentes municipales luego de que en 2021 se vivieran dos suspensiones y una anulación que evitaron la elección de autoridades.

Mientras que el 6 de junio pasado el estado vivió una jornada de votaciones, en San José Miahuatlán y Teotlalco inconformes tomaron desde temprano los consejos municipales del Instituto Electoral del Estado (IEE) impidiendo la distribución de paquetería electoral.

Los inconformes fueron identificados como afines al partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) que no logró el registro de sus candidatos, por lo que al reponerse los procesos extraordinarios se dejó fuera a la fuerza política.

En Tlahuapan, en cambio, el conteo inicial validó como ganador a Alberto Roa Benítez, candidato del partido Pacto Social de Integración (PSI), pero el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Compromiso por Puebla (CPP) recurrieron a tribunales.

El 14 de octubre, horas antes de que en todo el estado se cambiaran las administraciones, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) decidió la anulación ante una diferencia corta entre el primer y segundo lugar, así como irregularidades con la paquetería.

A falta de presidentes municipales electos, el Congreso del estado designó ese mismo día concejos municipales para hacer frente a las administraciones y en siguientes semanas el IEE emprendió una etapa de organización para los comicios extraordinarios en el 2022.

La convocatoria final definió un proceso de apenas tres meses para la elección, con lineamientos de paridad de género, selección de candidatos, así como la campaña electoral que duró casi dos semanas.

Aunque corto, este proceso estuvo marcado por inconformidades de los representantes de los partidos políticos que señalaron exclusión y que incluso derivaron en recursos ante el tribunal local y el federal.

En el caso de Morena, por ejemplo, se inconformaron porque no los dejaron registrar candidatos en Miahuatlán y Teotlalco, mientras que el PRI reclamó que el IEE permitiera que la candidata de PSI en Miahuatlán se registrara con el nombre de su hijo como apodo y que así saliera en las boletas.

El jueves previo a la jornada electoral, por otro lado, se suscitó un acto de amenaza y golpes contra las hermanas del  candidato a la presidencia de Tlahuapan por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Marco Antonio Calderón Altamirano, quienes acusaron que un grupo de hombres buscó dejar un mensaje al contendiente.

Según lo ha adelantado el IEE, en las elecciones de mañana podrán votar 42 mil 181 ciudadanos, 29 mil 549 en Tlahuapan, 10 mil 16 en Miahuatlán y sólo 2 mil 616 en Teotlalco.

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