Las chalupas poblanas son uno de los antojitos más tradicionales de la gastronomía mexicana y no pueden faltar en las mesas durante las fiestas patrias. Prepararlas en casa es sencillo y económico, pues con pocos ingredientes se obtiene un platillo lleno de sabor que representa la esencia de Puebla.
De acuerdo con Larousse Cocina, las chalupas poblanas se elaboran con ingredientes básicos y accesibles:
Su preparación es sencilla: primero se cuece la carne hasta deshebrarla, luego se preparan las salsas y, finalmente, se colocan las tortillas en manteca caliente para cubrirlas con carne, salsa roja o verde y un toque de cebolla y queso.
1. Cocer la carne: hierve la falda de res con cebolla y sal por unos 40 minutos, hasta que esté suave. Deshebra y reserva.
2. Salsa roja: cuece jitomates, ajo y cebolla; licúa con un poco de agua y sal al gusto.
3. Salsa verde: hierve jitomates verdes, chiles serranos, ajo y cebolla; licúa con cilantro, sal y agua.
4. Montaje: en un sartén con manteca de cerdo, coloca las tortillas pequeñas, añade un poco de carne deshebrada y baña con salsa roja o verde. Decora con cebolla y queso fresco.
Este antojito suele servirse en órdenes de tres a cinco piezas y, además de ser típico en las fiestas patrias, también es popular como desayuno o incluso para aliviar la resaca.
Los precios de las chalupas poblanas varían según el lugar donde se compren:
Esto las convierte en un platillo accesible para cualquier presupuesto, tanto para quienes prefieren comer fuera como para quienes desean prepararlas en casa.
En el mes de septiembre, las chalupas poblanas son protagonistas en ferias, restaurantes, fondas y hogares. Gracias a su fácil preparación y bajo costo, se convierten en la botana ideal para compartir con la familia y amigos durante el 15 y 16 de septiembre.
Ya sean rojas, verdes o combinadas, las chalupas poblanas son un símbolo de identidad culinaria que continúa conquistando paladares dentro y fuera de Puebla. Prepararlas en casa resulta económico, sencillo y una excelente opción para las fiestas patrias. Con ingredientes accesibles y pasos fáciles de seguir, este antojito se mantiene como uno de los más queridos de la gastronomía mexicana.