Durante años la mascota del Club Puebla fue un personaje emblemático y representativo del estado, “Max Camote”.

Un personaje cuya figura recordaba al tradicional dulce poblano.

Y, por supuesto, con la que los enfranjados se identificaron durante años.

Sin embargo, en septiembre de 2019, la directiva del Club Puebla cambió la imagen de su mascota.

La nueva mascota del Club Puebla, la cual no fue muy bien recibida por los aficionados, recibió el nombre de “El Fuerte”, el cual alude a diversas características del equipo y la historia poblana.

Al promover la imagen de la mascota, un hombre con barba de candado y lentes, se dijo que se llamaba así por ser “comandante máximo de los enfranjados y guardián del Estadio Cuauhtémoc”.

El cual era de origen poblano, por lo que estaba orgulloso de sus raíces, enamorado de la gastronomía poblana, comprometido con los valores de los niños y era aficionado del equipo.

El cambio de mascota no fue bien recibido por la afición que siguió reconociendo a “Max Camote” como la oficial.

En mayo del año 2021, la directiva del Club Puebla corrió del estadio Cuauhtémoc a “Max Camote”, antigua mascota, quien asistió al partido de cuartos de final que disputaron en contra del Atlas.

¿Qué pasó con Max Camote?

Dentro de la botarga de “Max Camote estaba Antonio Coca Roura, quien le daba vida.

Y el cambio se debió a que Antonio Coca se negó a negociar su continuidad, como mascota del equipo.

De hecho, se dijo que Antonio Coca registró los personajes, sin avisarle al Club Puebla. Además, ocupaba la imagen del equipo para eventos privados.

Antonio Coca además también estaba dentro de las botargas de los equipos Pericos y Ángeles de Puebla, enfocados al béisbol y el basquetbol, con quienes también terminó su relación por motivos similares.

En general, “Pepe Perico”, “Pancho Perico”, “Rocco”, “Goyo el Puma”, “El Azteca”, “Benny el Venado” y “Max Camote” son las botargas de equipos profesionales a las que ha dado vida Antonio Coca Roura.

Hasta el año 2020, de acuerdo con registros periodísticos, Toño Coca tenía 25 años como animador, usando diversas botargas de clubes profesionales.

Se dedicaba a la fabricación de botargas y tenía una empresa de animación, encabezada por “Pancho Perico” y “Max Camote”.

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