En este Día Internacional de la Mujer, quiero dirigirme especialmente a todas las mujeres de México con un mensaje de reconocimiento, en un mundo donde a menudo se nos presiona para conformarnos con roles predefinidos de género y expectativas limitadas; quiero recordarnos el increíble potencial que cada una de nosotras posee, para afrontar los desafíos y obstáculos que se nos presentan, es necesario que nos reconozcamos a nosotras mismas como seres capaces, fuertes y valiosos.

Es importante hablar sobre la importancia de la diversidad y la inclusión en todos los ámbitos de la sociedad, incluyendo las matemáticas, ingenierías, ciencias, artes y humanidades; estos campos no solo son determinantes para el avance de la humanidad, sino que también ofrecen oportunidades para que las mujeres puedan contribuir de manera significativa y dejar su huella en el mundo.

Las mujeres han demostrado una y otra vez su capacidad para sobresalir en áreas que históricamente han sido dominadas por hombres, desde Katherine Johnson, cuyos cálculos matemáticos fueron fundamentales para la NASA durante la era de la carrera espacial, hasta Marie Curie, pionera en el campo de la radiactividad; las mujeres han dejado una marca imborrable en la ciencia y la tecnología. Más aún, las mujeres han desempeñado roles fundamentales en el mundo del arte, la literatura, la filosofía y muchas otras disciplinas humanísticas; desde Frida Kahlo hasta Maya Angelou, las mujeres han utilizado su creatividad y su voz para inspirar, provocar reflexiones y promover el cambio social.

Sin embargo, todavía enfrentamos barreras que impiden que las mujeres alcancen su pleno potencial en estos campos; los estereotipos de género, las brechas salariales y la falta de representación en puestos de liderazgo son solo algunos de los desafíos que enfrentan las mujeres en su búsqueda de igualdad de oportunidades.

Es por eso que hoy, debemos derribar estas barreras y crear un mundo donde todas las personas, independientemente de su género, raza, religión o situación socio económica, tengan las mismas oportunidades para perseguir sus pasiones y alcanzar el éxito en cualquier campo que elijan. Debemos apoyar y elevar las voces de nuestras hermanas, especialmente aquellas que pertenecen a comunidades marginadas o desatendidas, para construir una sociedad más inclusiva y equitativa para todos.

Es esencial que nos comprometamos con la educación como un medio para el cambio y el progreso, debemos defender el acceso igualitario a la educación para todas las mujeres y niñas, y trabajar para eliminar las barreras que impiden su participación y éxito en el ámbito educativo.

La educación es un poderoso vehículo que nos puede llevar hacia la independencia económica y emocional, por lo que debemos aprovechar al máximo las oportunidades educativas que se nos presentan; ya sea en las aulas de una universidad, en cursos en línea o mediante el aprendizaje autodidacta, nunca subestimen el valor del conocimiento. La educación no solo nos proporciona habilidades y conocimientos prácticos, sino que también nos da la fuerza y confianza necesaria para enfrentar cualquier desafío que se nos presente en la vida.

El camino hacia la independencia y realización personal no siempre será fácil, habrá obstáculos y desafíos en el camino, pero cada paso hacia la autonomía será un paso hacia un futuro más brillante y prometedor.

Invito a todas las mujeres a seguir adelante con valentía, a desafiar los estereotipos y a perseguir sus sueños con determinación, también a los hombres a ser aliados en esta lucha por la equidad, apoyando y promoviendo la participación activa de las mujeres en todas las áreas del conocimiento y la creatividad.

Juntos, podemos construir un mundo donde todos seamos libres para perseguir nuestros sueños y alcanzar nuestro máximo potencial.

Google News